El economista Santiago Niño Becerra tiene muy claro a lo que nos enfrentaremos en España. El precio del aceite de oliva continúa disparado, y todo hace indicar que se mantendrá esa tendencia al alza. En vista de lo que se aproxima ha querido mandar un mensaje a la ciudadanía.
Todo lo que tiene que ver con la alimentación y los precios genera preocupación e incertidumbre. Y más cuando se trata de un artículo con tanto protagonismo en la cocina de nuestro país. El constante incremento de su valor le está llevando prácticamente a convertirse en un producto de lujo.
En los últimos meses, como se ha podido comprobar en las estanterías de los supermercados, ha duplicado su precio. La botella de litro de aceite virgen extra ya se aproxima a los 10 euros. Esto no solo afecta al bolsillo del consumidor, también a sus hábitos.
Muchas familias se ven incapaces de soportar esos precios y se ven en la obligación de recurrir a otras alternativas. Una de las soluciones que encuentran pasa por comprar aceite de girasol.
Pero estas medidas tampoco se presentan como la mejor decisión, apuntó Niño Becerra en una entrevista en TV3. Sobre todo porque por lo que pueden acarrear desde el punto de vista económico.
Niño Becerra cree que es un problema que irá a más
Ante el imparable crecimiento del coste de la botella de aceite de oliva, el economista considera lógico que se busquen "sustitutos". Y la opción más asequible que encuentran los usuarios es el aceite de girasol. Pero esta modificación en los hábitos de consumo también repercutirá sobre su precio, cuenta Niño Becerra.
Explica que "la teoría económica afirma, y con razón, que cuando el precio de un artículo aumenta, el precio del sustituto también se eleva". Esto se debe al incremento en la demanda de dicha solución alternativa.
El fenómeno económico al que se refiere es la ley de la oferta y la demanda. Al existir una subida en el precio del aceite de oliva, la demanda de este artículo irá cayendo. El consumidor opta por buscar sustitutos más baratos, y es ahí cuando entra en escena el aceite de girasol.
Aumentarán sus ventas, pero esa mayor demanda también provocará que haya un alza de los precios. Con todo esto, el economista pretende demostrar que la búsqueda de una solución más económica no siempre se traduce en un ahorro importante. Principalmente debido al repunte que suelen experimentar los sustitutos.
Incertidumbre con el aceite de oliva
Hay muchas dudas sobre la evolución que sufrirá el precio del aceite de oliva durante el último tramo de año. Los profesionales del campo ya advierten de nuevas subidas que atribuyen sobre todo a la escasez debido a las malas cosechas.
Mientras tanto, en otros países de Europa se ha podido comprobar como los mismos productos todavía mantenían unos precios razonables. Algo que resulta especialmente complicado de entender.
Niño Becerra habla claro sobre el problema de las familias
Santiago Niño Becerra hizo referencia al notable aumento de los precios de los alimentos. Los bolsillos de las familias lo notarán en exceso durante este mes debido a los gastos de la vuelta al cole y al alza de los costes de los medicamentos.
Se dan las condiciones precisas para que haya una pérdida de poder adquisitivo por parte de los ciudadanos. Al mismo tiempo comprueban como sus salarios continúan estancados o no evolucionan al mismo ritmo que los precios. "No avanzan en esa dirección", sostiene.
El economista recuerda que las "familias españolas de media han perdido el 4,6%" de poder adquisitivo desde 2020. Lo que supone que nos enfrentemos a un gran problema.