El mercado de la vivienda en España puede sufrir un cambio importante a corto plazo. La última medida recogida en el Boletín Oficial del Estado abre la puerta a que en el futuro se encarezcan los inmuebles en nuestro país.
A partir de que estallara la pandemia de coronavirus en 2020 se fomentó el uso del teletrabajo en la mayoría de países. Sin embargo, en torno a esta modalidad laboral nunca había existido ningún tipo de regulación. Todo quedaba condicionado a las necesidades y controles que aplicaran las empresas.
Durante este tiempo, cada país ha apostado por implantar sus propias leyes en este sentido. Pero no ha sido hasta hace poco cuando la Unión Europea decidió unificar criterios con intención de regular dicha práctica. En ella se recogía todo lo referente a los beneficios fiscales que acarrearía este modelo de trabajo.
El BOE publicó el 4 de agosto el acuerdo marco en materia de teletrabajo. Se trata de una ley impuesta desde Bruselas que promete revolucionar de alguna manera el mercado laboral. Pero también puede acabar afectando al sector de la vivienda de forma indirecta.
En total hay 18 países de la Unión Europea que han firmado dicho convenio, recoge el portal El Debate. Entre ellos están Francia, Alemania, España, Austria, Países Bajos, Luxemburgo, Bélgica, Noruega, Portugal, Suecia, Malta o Croacia, entre otros. Abarca un amplio número de territorios, y por lo tanto de posibles beneficiarios.
Una oportunidad para trabajar en otros países
Se les abren muchas más oportunidades a todos aquellos que disfruten del teletrabajo y puedan cambiar de residencia con facilidad. De esta forma, los que trabajen online fuera de su país mantendrán los beneficios sociales y laborales del país en el que están contratados. Por lo tanto, conservarán sus condiciones como si permanecieran en el territorio de origen y no en el de destino.
Aunque habría que profundizar en la letra pequeña para conocer más detalles sobre las condiciones, hay un aspecto que resulta imprescindible. Y es que obligan a que el traslado sea real, que al menos la mitad de los días residan fuera de su país.
A simple vista, estos cambios pueden tener sus ventajas. Sin embargo, los analistas creen que acabarán afectando de manera importante en el sector inmobiliario. Es de sobra conocido por todos que España se presenta como un destino perfecto por clima, gastronomía y precios competitivos.
Con todo esto, muchos teletrabajadores pertenecientes a los países incluidos en el acuerdo marco se decantarán por España para vivir. Se darán situaciones un tanto curiosas.
Entre ellas, que profesionales originarios de Alemania, Dinamarca o Luxemburgo, con salarios más elevados que los nuestros, se muden a España. Esa mayor demanda de vivienda acabará provocando un repunte del precio de los inmuebles, que afectará tanto al mercado de la compra como del alquiler.
Los españoles saldrán perjudicados
Según datos de Adecco, basándose en informaciones del INE y Eurostat, muchos de estos empleados duplican el sueldo medio del español. A esto se le añade que somos el territorio de la Unión Europea con una mayor caída de renta per cápita en los últimos años.
Por lo tanto, el resultado será una situación de indefensión para los españoles. Ese posible desembarco de profesionales pertenecientes a otros países de la UE originará un encarecimiento del parque de viviendas. En ciertas ciudades españolas los precios se han disparado de forma considerable. Es el caso de Madrid, Barcelona o Málaga.
Lo atribuyen sobre todo a la llegada de extranjeros con recursos económicos y al turismo. Ante eso, a mucha gente de aquí se les ha forzado a trasladarse a las afueras o a barrios peores. El abono de rentas por encima de los 1.000 euros se ha convertido en algo cada vez más frecuente.