España es el quinto país, según la Federación Europea de Aguas Envasadas (EFBW), que consume más agua embotellada. Y es que las botellas de agua embotellada están en todas partes y existen de muchas variedades, hasta hay de muy atractivas para la venta.
Aunque depende de la comunidad autónoma que vivamos, es muy común que la gente prefiera la embotellada. Ya sea por el sabor o porque piensan que es mucho más sana y beneficiosa para el organismo. Sin embargo, a continuación descubrirás cómo son realmente las cosas...
Es verdad que tanto como el agua embotellada como el agua de grifo pasa por diferentes controles exigentes. A grandes rasgos, esto significa que las dos son totalmente aptas para el consumo. Ahora bien, hay ciertos detalles que hay que tener en cuenta a la hora de decantarnos por una u otra.
Según un estudio publicado en la prestigiosa revistaFrontiers in Chemistry, en el agua embotellada tienes muchas más posibilidades de encontrar partículas de microplásticos. Estas partículas son muy pequeñas, por lo que solo se pueden apreciar a través de un microscopio.
Y te preguntarás ¿de dónde vienen estas partículas? Pues de los polímeros sintéticos utilizados en el proceso de fabricación de los envases de agua. Estos polímeros van a parar al agua que hay dentro de la botella y quedan repartidos por todo el líquido.
La conclusión de esta investigación es que con el agua de grifo se consume mucho menos plástico. Esto hace que sea mucho más sana y buena para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Además, sí que es verdad que existe un compromiso con el medioambiente por parte de casi todas las empresas que fabrican agua embotellada. Sin embargo, es no cambia que los plásticos de las botellas van a parar al mar y llega a los animales marinos y provoca su muerte. Y es que confunden estas partículas de plástico con comida.
En nuestro país, menos en las zonas dónde se avisa previamente y no se recomienda el consumo, no hay diferencias graves de peligro entre el agua de grifo y la embotellada. Pero, por los siguientes motivos, es preferible beber agua del grifo:
Es muy importante resaltar, que en las embotelladas además de las partículas de plástico, casi todas pasan por un tratamiento potabilizador. Esto, lo podemos ver rápidamente reflejado en el precio del producto, lo que será mucho más cara que la de grifo. ¿Realmente vale la pena invertir dinero en agua embotellada? Pues, depende de cada uno, pero sigue leyendo y podrás contestar tu mismo a esta pregunta.
Seguidamente, si se hace una evaluación ecológica, las aguas de grifo también son mejores. Pues, los plásticos procedentes del petróleo implican un gran coste.
El agua del grifo tiene un menor impacto medioambiental. Por poner un ejemplo, para producir agua embotellada se necesita unas 300 veces más energía que para un solo litro de la del grifo.
Como otro punto a favor del agua de grifo destacaríamos el hecho de que las aguas que están un tiempo bastante largo embotelladas y a temperatura ambiente, quedan contaminadas por un metal.
Este metal se llama antimonio y se libera a través del plástico. No es peligroso ni grave, pero tampoco es nada recomendado para el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Finalmente, es evidente que los consumidores tienen la decisión final, pero lo mejor es saber si el agua de tu grifo de tu zona en concreto es sana y buena. Y es que es evidente que sería mucho más recomendable consumirla y dejar la embotellada por momentos que sea estrictamente y muy necesario comprarla. ¡Tú decides!