España vuelve a verse salpicada por una alerta sanitaria sobre un producto vendido aquí y en otros países europeos. En concreto, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) ha confirmado haber recibido un aviso desde Alemania. En el país germano las autoridades sanitarias han detectado la presencia de elementos extraños en un producto importado de fuera de la Unión Europea (UE).
Las autoridades sanitarias germanas notificaron a las españolas a través de la Red de Alerta Alimentaria Europea (RASFF). Se trata de un mecanismo de alertas, que facilita la comunicación entre los países europeos, así como la rápida reacción de las autoridades. En este caso, el distribuidor del producto en cuestión ha pedido a los clientes devolver el producto a los puntos de venta.
Alerta alimentaria por un producto vendido en varios países europeos
Según ha informado la AESAN, el producto que ha hecho saltar las alarmas se llama Cooked Fava Beans. Se trata de unas habas cocinadas según una receta de origen palestino, importado desde el Líbano. El problema detectado por las autoridades alemanas es que el producto presenta sulfitos no comunicados en su etiquetado.
Es muy importante que los productores hagan constatar en las etiquetas de sus productos todos los ingredientes. En general, el problema más común es la presencia de rastros de frutos secos, leche o marisco, algo peligroso para las personas alérgicas. En este caso, sin embargo, el problema es la detección de sulfitos, un grupo de sustancias derivadas del azufre.
La reacción del operador holandés encargado de la distribución de producto en España no se ha hecho esperar. Este ha informado del problema a todos los clientes, y ha pedido la devolución del producto a los puntos de venta. Según el mismo, se procederá a la modificación y actualización de la etiqueta.
Detectan sulfitos no comunicados en unas habas cocinas de la marca Chtoura Garden
Las habas cocinas afectadas por el aviso de las autoridades sanitarias se venden bajo la marca Chtoura Garden en varios países europeos. Según la AESAN, este producto se distribuye en latas de metal, y la fecha de consumo preferente del mismo es el 30/04/2024. Su peso total es de 400 g por unidad, se conserva a temperatura ambiente y su código de barras es 5285001400225.
En España también se ha llegado a vender, si bien la AESAN no ha ofrecido cifras específicas de las posibles ventas. Sea como sea, toda la información ha sido trasladada "a las autoridades competentes de las comunidades autónomas". Son estas últimas las que, tras recibir el aviso a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIRI), deben asegurarse de retirar los productos.
Al mismo tiempo, la AESAN, ha recomendado, de forma preventiva, que todas las personas alérgicas a los sulfitos que eviten consumir el producto en caso de tenerlo. Ahora bien, las autoridades españolas han insistido que, para el resto de la población, "el consumo de este producto no comporta ningún riesgo".
Detectan trazas de avellanas en una morcilla de arroz con piñones
El aviso de la AESAN se ha producido casi al mismo tiempo que otro sobre una morcilla de arroz con piñones. En este segundo caso, el problema detectado por las autoridades españolas ha sido la presencia de alérgenos de avellanas no incluidos en el etiquetado.
La misma empresa comercializadora fue la que comunicó la incidencia a las autoridades competentes de Aragón. De hecho, la distribución inicial del producto se ha producido en esta misma comunidad autónoma. Posteriormente, la información fue trasladada a la AESAN, "a fin de no poner a disposición de la población alimentos no seguros".