Las pensiones de jubilación sufren variaciones todos los años. Millones de españoles permanecen muy atentos todos los ejercicios a las distintas novedades que introduce el Gobierno. Aún restan unos cuantos meses para 2023, pero ya están en marcha una serie de cambios que entrarían en vigor a partir del próximo enero.
Es habitual que a partir de septiembre la Seguridad Social empiece a barajar una serie de modificaciones en el sistema de pensiones. En muchos casos abordan las subidas en las pagas, pero en otros casos también recogen un endurecimiento en el acceso a la jubilación. Por lo tanto, habrá que estar muy atentos.
A lo largo de los próximos meses, la pensiones de jubilación se centrarán sobre todo en cuatro ejes. En el Ministerio de la Seguridad Social ya cuentan con un borrador con sus planes de futuro. El responsable de esta cartera, José Luis Escrivá, adelantó que a corto plazo se presentará una nueva propuesta sobre este asunto.
Los cambios en las pensiones para los que hay que prepararse
Esto desencadenará unos cuantos cambios desde el punto de vista económico. De alguna manera quedan pendientes de aclarar una serie de aspectos esenciales. Entre ellos, las cuantías a percibir por parte de los jubilados y sus cotizaciones.
Trabajan a marchas forzadas para tratar de adaptar el sistema a la situación del país. Cada vez son más las personas retiradas y el número de nacimientos continúa a la baja. Tampoco ayuda en todo esto el porcentaje de población activa, incapaz de compensar el número de pensionistas.
La Seguridad Social se enfrenta a una serie de modificaciones en cuanto a las pensiones contributivas, como son la de la jubilación. De momento están trabajando sobre una serie de pautas que se confirmarán a lo largo de los próximos meses. Si ya estás jubilado o tienes intención de hacerlo próximamente, no te pierdas las cuatro claves que anunciará el organismo público.
1. Ampliación del periodo de cómputo
Una de las grandes preocupaciones de los trabajadores que se encuentran al borde de la retirada laboral es conocer la cuantía de la pensión. Y para ello desempeña una labor esencial el tiempo trabajado. Sobre la mesa se encuentra la posibilidad de ampliar el periodo de cómputo.
En estos momentos, para hacer el cálculo de la base reguladora se toman como referencia los últimos 25 años de base de cotización. La intención pasa por aumentar ese periodo hasta los 35 años. Lo que perjudicaría a la larga a los jubilados, ya que recibirían posiblemente una pensión más baja.
En cualquier caso, se estudia la opción de que seleccionen los 25 mejores años para poder disfrutar de una mayor cuantía. No obstante, el departamento de Escrivá se ha encontrado con la oposición de los sindicatos.
2. Revalorización de la pensión según el IPC
La intención es que las pensiones de jubilación se revaloricen en función del porcentaje de los Índices de Precios sobre el Consumo (IPC). A principios de este año, las contributivas lo hicieron un 2,5%. Para 2023, todo queda pendiente de la decisión del Gobierno.
Hay mucha incertidumbre sobre la subida de las pagas, sobre todo si se tiene en cuenta la elevada inflación. En agosto alcanzó el 10,4%. Lo que se pretende es que los jubilados no pierdan poder adquisitivo. Para establecer el incremento se tendrá en cuenta la inflación media de noviembre, tal y como fija la normativa legal.
3. Sin límite en las bases máximas
Sobre la mesa de la Seguridad Social también se encuentra la posibilidad de aumentar la base máxima de cotización. Esto facilitaría que los pensionistas con mayores ingresos puedan disponer de pensiones más elevadas cuando se retiren. De momento, todo está en estudio, pendiente de que pueda hacerse realidad en el futuro.
4. Incremento del SMI
El Gobierno ya ha adelantado que el Salario Mínimo Interprofesional sufrirá una revalorización. Dicha propuesta será debatida entre Trabajo y Seguridad Social. Escrivá adelantó que el ascenso del SMI se trataría de adaptar al 60% del salario medio de los trabajadores.