Los superalimentos, tan de moda en los últimos años, no siempre son productos exóticos y poco comunes. En España ya contamos con productos muy característicos de nuestra dieta que tremendamente ricos en vitaminas y nutrientes. De hecho, uno de estos alimentos fue, durante años, uno de los 'snacks' más populares, aunque a día de hoy esté un poco pasado de moda.
Se trata de una legumbre de color amarillo, cuyo consumo se remonta a hace miles de años, tal como lo demuestran las evidencias históricas. Lo que más llama la atención de los nutricionistas es la gran cantidad de proteínas que contiene, además de su capacidad para reducir el colesterol. Se trata, en definitiva, de un producto que deberíamos consumir con mucha más frecuencia, para mejorar nuestra salud.
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El peculiar 'snack' español que fulmina el colesterol y tiene más proteínas que la carne
El alimento con muchísimas más proteínas que la carne y que combate el colesterol no es otro que el altramuz. Esta leguminosa amarilla, de la familia Fabaceae, cuenta con muchos otros nombres a lo largo de la geografía española: chocho, almorta, entremozo, etc.
En el Antiguo Egipto ya se consumía, y prueba de ello son los hallazgos de estas semillas en tumbas de la época. En nuestro caso, fueron los romanos los que extendieron su cultivo por todo el Imperio.
La planta del altramuz es apreciada, en primer lugar, por los vistosos colores de sus flores, con pétalos de gran riqueza cromática. De hecho, es habitual el uso de esta planta como ornamento en jardines y centros comerciales.
La semilla del altramuz, hoy en día, se ha visto relegada a un segundo plano, y muchas veces acaba convertida en alimento para el ganado. Lo cierto es que cuenta con un característico sabor amargo, no apto para cualquier paladar.
El superalimento que muchos han olvidado
Si bien su consumo es relativamente bajo hoy en día, su riqueza nutricional sigue siendo igual de alta que siempre. Según los expertos, esta legumbre es un auténtico milagro nutricional.
Prueba de ello es la gran cantidad de proteínas que contiene: por cada 100 gramos, 36 son proteína, lo que deja muy atrás al chuletón o al filete. De hecho, casi consigue igualar a la soja, que por cada 100 gramos contienen 37 gramos de proteínas.
Pero sus beneficios no quedan ahí, ya que el altramuz también contiene hidratos de carbono y ácidos grasos no saturados. Un dato muy llamativo es la importante cantidad de fitoesteroles y esteroles vegetales, muy característicos en algunas semillas, aceites y cereales.
Enemigo declarado del colesterol malo
Su importancia radica en la capacidad de mantener e incluso reducir los niveles de colesterol malo en el cuerpo. Esto se hace, además, sin modificar los niveles de colesterol bueno.
Según explica en El Español el nutricionista José Gallardo, "el secreto está en que los esteroles y el colesterol compiten entre sí por su absorción a nivel intestinal". En esta especie de lucha, el cuerpo prioriza la absorción de los primeros, por lo que acaba desechando el colesterol.
El descenso es más que notable, ya que la ingesta de altramuces puede implicar hasta un 10% menos de colesterol sanguíneo. Los expertos recomiendan consumir entre 1,5 y 2 gramos diarios de este leguminoso si queremos eliminar colesterol, y entre 0,8 y 1,5 si queremos mantener los niveles estables.
Además de todo esto, las semillas de altramuz también resultan beneficiosas para el sistema cardiovascular y para el sistema nervioso.
Los riesgos del consumo de los altramuces
Si bien es cierto que los altramuces pueden resultar muy beneficiosos, sí que hay algunos riesgos asociados a su consumo que debemos conocer. Esta legumbre cuenta también con antinutrientes, es decir, propiedades que dificultan la absorción de nutrientes en nuestro organismo.
Además, debido a su contenido en antitripsinas, su consumo suele ir asociado a una mayor flatulencia y cierto dolor abdominal. Ahora bien, con una correcta cocción o un proceso de salmuera en condiciones, estos efectos negativos suelen desaparecer.
Otro riesgo a tener en cuenta es la posible intoxicación por "agua de cocción de chochos". Se trata de una afectación poco común, producida por la ingesta de ciertos elementos dañinos (alcaloides) presentes en los altramuces.
Se manifiesta por una sensación de sequedad bucal, pérdida de agudeza visual y molestias provocadas por la luz. Si no se actúa rápidamente, hace acto de presencia la fiebre y una tensión arterial disparada.