Logo EspanaDiario.tips
Logo EspanaDiario.tips
Logo Messenger Espanadiario.tips
Logo whatsapp
Cápsula de oxigenoterapia

¿Qué es la oxigenoterapia? Beneficios de la terapia con oxígeno

La oxigenoterapia puede ayudar a estimular la producción de glóbulos blancos y aumenta la eficacia de las enzimas antioxidantes.

En general, la oxigenoterapia es un tipo de tratamiento médico que utiliza la aplicación de oxígeno mediante diferentes dispositivos de suministro de oxígeno para curar o manejar diferentes afecciones como el asma águdo o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.

Para conocer más sobre esta técnica hospitalaria, explicaremos más en profundidad qué es y en qué consiste la oxigenoterapia; sus beneficios y como qué dispositivos son utilizados  para llevar a cabo el tratamiento y en qué consisten cada uno de ellos.

¿Qué es la oxigenoterapia?

La oxigenoterapia consiste en la administración deliberada de oxígeno a concentraciones mayores a las del aire ambiental. Esta práctica se utiliza para tratar o prevenir diferentes patologías y condiciones como las descritas a continuación:

  • Hipoxemia (falta de oxígeno en la sangre)

  • Dificultad respiratoria grave (p. ej., asma aguda o neumonía)

  • Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC, que incluye bronquitis crónica, enfisema y asma crónica)

  • Hipertensión pulmonar

  • Ataque al corazón

  • Terapia a corto plazo, como recuperación post anestesia

  • Gangrena y embolia gaseosas

  • Malestar por descompresión

  • Envenenamiento por monóxido de carbono

  • Hipoxia cerebral (falta de oxígeno en el cerebro)

Asimismo, la oxigenoterapia también es conocida como una serie de técnicas diferentes en las que el oxígeno, el ozono o el peróxido de hidrógeno se administran a través de gas o agua para matar microorganismos, mejorar la función celular y promover la curación de los tejidos dañados.

En general, respirar oxígeno prescrito aumenta la cantidad de éste en la sangre, reduce el trabajo extra del corazón y disminuye la dificultad para respirar. La oxigenoterapia con frecuencia suele recomendarse tanto en el entorno de atención domiciliaria como en los centros hospitalarios.

¿Para qué sirve? Beneficios y de la terapia con oxígeno

La oxigenoterapia consiste en un tratamiento clave para el cuidado respiratorio. Su propósito principal es el de  aumentar la saturación de oxígeno en los tejidos donde los niveles de concentración son demasiado bajos debido a alguna patología o lesión. No obstante, también se han descrito otros beneficios añadidos como los descritos en la siguiente lista:

  • Estimula la producción de glóbulos blancos

  • Mejora la entrega de oxígeno del torrente sanguíneo a los tejidos del cuerpo

  • Acelera la descomposición de petroquímicos

  • Aumenta la eficacia de las enzimas antioxidantes

  • Aumenta la flexibilidad y la eficiencia de las membranas de los glóbulos rojos

  • Acelera el ciclo del ácido cítrico, que a su vez estimula el metabolismo básico del cuerpo

¿Y la oxigenoterapia facial?

Por otro lado, la oxigenoterapia facial es en cambio un tratamiento estético utilizada para rejuvenecer la piel de la cara, el cuello y el escote. Consiste en activar la circulación sanguínea y aplicar directamente oxígeno en la piel para estimular la producción de colágeno, elastina y otros nutrientes, para promover la hidratación de la piel y retrasar así el envejecimiento. Es una técnica indolora que se realiza con un aparato de ultrasonido facial.

Además de retrasar el envejecimiento, la oxigenoterapia facial también consigue dejar una piel luminosa, elástica, sin flacidez y combate manchas, acné y cicatrices. En general, suele estar recomendada para personas mayores de 35 años y se suelen necesitar de 6 a 10 sesiones (siempre dependiendo del caso individual de la persona, edad y su estado facial).

Dispositivos de oxigenoterapia

La oxigenoterapia puede aplicarse mediante diferentes tipos de sistemas o dispositivos de suministro de oxígeno. En el hospital por ejemplo, el oxígeno se administra a través de una cánula nasal o máscara adherida a un tubo adherido a una fuente central que se encuentra en la pared. Sin embargo, también existen otros dispositivos que pueden utilizarse en el hogar o fuera de casa, que suelen ser compresores, tanques portátiles, etc.

A continuación, revisaremos algunos de los sistemas de suministro de oxígeno más comunes actualmente. Estos incluyen el oxígeno comprimido, el oxígeno líquido, el concentrador de oxígeno y el dispositivo de conservación de oxígeno.

1. Oxígeno comprimido

En este caso el aire se almacena como un gas en un tanque. Un medidor de flujo y un regulador están conectados al tanque de oxígeno para ajustar la cantidad de éste que se suministra. Este dispositivo generalmente se prescribe cuando el oxígeno no se necesita constantemente (por ejemplo, cuando se realiza actividad física).

2. Oxígeno líquido

Este sistema se presenta también un tanque portátil que se puede llenar desde el tanque estacionario para poder realizar viajes fuera de casa. Se conoce con este nombre porque el oxígeno es líquido a temperaturas muy bajas. Cuando se calienta, el oxígeno líquido se convierte en gas, que es lo que utiliza la persona.

3. Concentrador de oxígeno

Esta forma de suministro eléctrica, tiene el tamaño de una maleta grande. Lo que realiza este dispositivo es extraer parte del aire de la habitación y separar el oxígeno, que será el que respirará la persona mediante una cánula nasal. Este sistema generalmente se prescribe para pacientes que requieren oxígeno suplementario constante o que deben usarlo cuando duermen.

4. Dispositivo de conservación de oxígeno

El dispositivo de conservación de oxígeno consiste en un sistema de flujo inspiratorio a demanda o de dosis pulsada. El sistema utiliza un sensor para detectar cuándo la persona empieza a inspirar, que es cuando el oxígeno se administra. Esta forma de suministro de oxígeno se puede usar mediante sistemas de oxígeno comprimido o líquido, pero no son recomendados para todas las personas.

Referencias bibliográficas:

  • Boleyn, M., & Costello, A. M. (2004). Oxygen Therapy. In A. J. Senagore (Ed.), The Gale Encyclopedia of Surgery (Vol. 2, pp. 1072-1077). Detroit: Gale.

  • Cooper, A., & Frey, R. J. (2005). Oxygen/Ozone Therapy. In J. L. Longe (Ed.), The Gale Encyclopedia of Alternative Medicine (2nd ed., Vol. 3, pp. 1524-1526). Detroit: Gale.