Las personas que quieran desprenderse de su casa el próximo año se verán afectadas por la nueva medida del Gobierno. El proyecto de Presupuestos de 2023 recoge un incremento de la plusvalía municipal que puede llegar hasta el 50%. Habrá una revisión de los coeficientes a la hora de realizar el cálculo de dicho impuesto.
El pasado 26 de octubre los tribunales se encargaron de anular este tributo. Sin embargo, Hacienda lo reemplazó con urgencia por otro mediante un Real Decreto-ley que entró en funcionamiento el 10 de noviembre.
Dicha norma determinaba que los coeficientes sufrirán una actualización anualmente. En el nuevo escenario que contempla el Fisco se aprecian importantes modificaciones en algunos ejercicios. La subida llega a ser de hasta el 50% para las viviendas que se compraron entre 2012 y 2015 y que se vendan en 2023.
¿Cómo afectará al bolsillo de los propietarios esta subida?
Los que tengan que asumir dicho impuesto apreciarán como hay una importante diferencia entre abonarlo este año o el siguiente. En el caso de un inmueble adquirido en 2013 y transmitido en 2023, la cuota aumentaría un 25% debido a la actualización de los coeficientes.
En Voz Pópuli ponen varios ejemplos para entender este nuevo escenario. En una vivienda comprada en 2012-2013 y vendida en 2022, se le aplicará un coeficiente del 0,10. Sin embargo, cuando se trate de un inmueble adquirido en 2013-2014 y traspasado en 2023, el coeficiente llegará al 0,15, lo que implica, por lo tanto, un alza del 50%.
En el caso de una comprada en 2012-2013 y vendida el próximo año, dicho coeficiente será del 0,12. Por lo tanto, el aumento será del 20%. Pero si se adquirió un año más tarde y se vende en 2022, el porcentaje es del 0,12 y del 0,14 si es en 2023.
En este caso, se aprecia un incremento del 25%. Para entenderlo mejor ponen el ejemplo de una vivienda con un valor catastral de 40 000 euros. Se compró en 2013-2014, se transfiere en 2022 y la cuota sería de 2240 euros. Sin embargo, en 2023 habría que abonar 360 euros más por esa subida del 25%, por lo que la cifra alcanzaría los 2600 euros.
También hay algunas reducciones en las plusvalías
Pero no todo serán subidas. También habrá bajadas, sobre todo en las viviendas adquiridas entre hace 14 y 19 años. Esto supone la etapa previa al estallido de la burbuja inmobiliaria. Las disminuciones irán del 0,36 a 0,19 para el de hace 19 años, y del 0,10 a 0,09 para el de hace 14.
El abogado especialista en Procesal Tributario en PwC Tax & Legal, Manuel Esclápez, se muestra sorprendido con las variaciones. Explica a Voz Pópuli que "se esperaba un ajuste del coeficiente de 2022 y una subida lineal de los años anteriores". Cree que si Hacienda opta por "subir algún ejercicio más que un lineal lógico, debería motivarlo, lo que no hace".
Desconoce si los coeficientes del Real Decreto "se corrigen ahora porque no estaban bien calculados". No se descarta que nos encontremos "con cambios de este tipo en las cuentas de cada ejercicio".
Hay que decir que los ayuntamientos, que son los encargados de cobrar este tributo, no tienen la obligación de elevarlos hasta este punto. En cualquier caso, la postura de Hacienda se trata de un guiño a las administraciones locales. Tras la anulación de dicho impuesto habían solicitado un fondo de compensación para recuperar lo perdido.
Esta solicitud puede ser el motivo por el que el Ejecutivo tenga detenida la tramitación del Real Decreto-Ley que crea la nueva plusvalía. Lo más probable es que dicha norma traiga consigo una serie de problemas. Los partidos de la derecha la recurrieron ante el Tribunal Constitucional al realizarse a través de un Real Decreto-ley.