Los mayas ya lo intuían, el cacao atesora sustancias que hacen de él un antioxidante. La forma más habitual de consumirlo es en solubles o en chocolate. Además, nos gusta mucho porque, cuando lo ingerimos nos proporciona puro placer.
Sin embargo, cuando lo ingerimos, creemos que hemos cometido un pecado. Pues ya es hora de desterrar ese mito. El medio digital 'Yo Dona' se ha puesto en contacto con la doctora María Izquierdo, catedrática de Nutrición de la Universitat de Barcelona, que ofrece su punto de vista sobre cómo introducir el cacao en nuestra dieta diaria.
«Cuanto mayor sea el porcentaje de cacao de un chocolate, menor será el contenido de otros componentes como azúcar, leche o manteca de cacao», asegura la experta, que añade: «El cacao natural es desgrasado, con un escaso tratamiento tecnológico y muy rico en componentes bioactivos, como los flavonoides, un tipo concreto de polifenoles que tienen una elevada actividad antioxidante».
Estos compuestos, son beneficiosos para la salud, manifiesta la doctora Izquierdo, especialmente para el sistema cognitivo y los sistemas cardiovascular y digestivo. Además, reducen el riesgo de algunas enfermedades crónicas como el cáncer.
Asimismo, hemos de añadir que la nutricionista señala que el cacao es un producto muy placentero. «Nuestro cerebro tiene dos sistemas de controlar el apetito: uno es el del hambre y otro el hedónico. En este último interviene un neurotransmisor muy potente que es la dopamina. Cuando ingerimos un alimento como el chocolate este sistema se dispara, se genera mucha dopamina, que nos da una sensación de placer muy intenso».
La leyenda negra del cacao
El citado medio ha abordado con la doctora María Izquierdo sobre los falsos mitos que giran en torno a las propiedades del cacao natural. La especialista aclara que el cacao natural tiene un contenido graso inferior al 10%. «Si se trata de chocolate, cuanto más rico sea en cacao, más bajo será en grasa y en azúcar», dice la barcelonesa.
Sobre si el chocolate es capaz de aumentar el peso de la ciudadanía, la nutricionista recalca que no existen alimentos que engorden. «El cacao natural es un alimento bajo en grasa, rico en fibra y en componentes bioactivos, que puede formar perfectamente parte de una alimentación variada y equilibrada».
Por otro lado, Izquierdo considera que el cacao es una buena opción para niños y adolescentes dentro de su alimentación diaria, siempre que se tome con leche, junto a otros alimentos y frutos de la temporada. «Por ejemplo, la combinación lácteos y cacao resulta muy interesante», señala.