A partir del viernes está previsto que se descuelgue sobre la Península Ibérica una DANA. Provocará una caída de los termómetros e intensas lluvias y tormentas, que serán más acusadas principalmente en cuatro zonas. Este escenario obligará a activar las alertas con vistas al fin de semana.
Aunque todavía estemos en pleno verano, todo hace indicar que el otoño se adelantará unas cuantas semanas. Las temperaturas se mantendrán un tanto contenidas y el calor intenso ya no regresará. Supondrá todo un alivio para gran parte del país, muy castigado por los elevados valores térmicos de agosto.
Las predicciones meteorológicas todavía no muestran unos resultados muy precisos. Los expertos sostienen que existe bastante incertidumbre en lo referente a los pronósticos. Sobre todo porque se desconoce en qué parte del país se descolgará ese embolsamiento de aire frío en altura.
Las consecuencias variarán también en función de su localización. En estos instantes se trabaja en dos escenarios diferentes. El primero de ellos es que la DANA descienda en el oeste de la Península.
Cubriría el espacio que va desde el Atlántico frente a Portugal hasta la frontera de España con el país luso. En el caso de que abarcara esta zona, llegaría a alcanzar hasta el golfo de Cádiz estancándose allí, publica el portal eltiempo.es.
De darse esta situación, las lluvias más intensas se producirían en el arco mediterráneo y en el interior de la Península. Habría bandas de precipitaciones que se extenderían desde el sur hacia el norte. En principio, esta posibilidad es la que suena con más fuerza en los pronósticos.
El otro escenario que se baraja contempla el descenso de la DANA sobre la Península. De ocurrir esto, los puntos más perjudicados por las precipitaciones los encontraríamos en la zona noreste. Entre ellas estarían las comunidades costeras del Mediterráneo (Cataluña y Comunidad Valenciana), el valle del Ebro y la cara sur de Pirineos.
Todavía a día de hoy se desconoce cuál de estas dos opciones se impondrá. Habrá que esperar a la evolución del tiempo durante las próximas horas. En cualquier caso, hasta uno o dos días antes no se sabrá con exactitud donde golpearán con más fuerza las tormentas.
Una semana marcada por el agua
La inestabilidad será la nota predominante durante los próximos días en gran parte del país. El desplome térmico que soportarán algunas provincias irá acompañado también de intensas lluvias.
Este miércoles será más acusada esta situación en el litoral de Barcelona, Girona y Tarragona. Indican que las tormentas no serán precisamente muy extensas, aunque sí bastante intensas. En menos de una hora se podrían acumular más de 40 mm de agua.
Durante la segunda mitad del día, estos episodios tormentosos se desplazarán hasta el interior de Cataluña y el sureste. De hecho, Albacete y la región de Murcia se encuentran con avisos amarillos.
Los termómetros recuperan unos grados
Entre el jueves y el viernes se espera que los valores térmicos repunten ligeramente. En cualquier caso, muchas zonas del interior y del norte se quedarán lejos de los 30ºC. Más pronunciado será ese incremento de las temperaturas a partir del jueves.
En Zaragoza o Madrid ya se rebasará la barrera de los 30ºC. También notarán este aumento de los termómetros en la costa del Cantábrico, en donde los registros rondarán entre los 25 y 28ºC.
Más estable será la situación que encontremos en las islas Canarias. No habrá grandes variaciones durante las próximas jornadas. En Las Palmas de Gran Canaria se manejarán en torno a los 26ºC, frente a los 30ºC de Santa Cruz de Tenerife. En cualquier caso, toda la atención estará puesta en la DANA que se descolgará a partir del viernes.