El precio del combustible sigue por las nubes y todo hace indicar que durante el verano irá en aumento. Por eso, cada vez reparamos más en las tarifas que establecen las estaciones de servicio. También es normal que surjan dudas sobre si la cantidad de carburante repostada se ajusta con lo que abonamos.
Para confirmar esto existe un truco que está a disposición de todos los usuarios. Se trata de la prueba de la probeta y que en principio debería encontrarse en cualquier gasolinera. Así al menos lo contempla la ley.
Será tan sencillo como establecer una cantidad determinada de litros en el surtidor y rellenar dicho recipiente. De esta forma comprobaremos si los litros que nos echan se corresponden con lo pagado, publica el diario Ideal.
En el caso de que detectes algún tipo de irregularidad se podrá denunciar. El mismo procedimiento realizaremos cuando solicitemos la prueba en cuestión y desde el establecimiento se nieguen a ello.
Más subidas con vistas al verano
Un año más, los conductores comprobarán como los precios de los combustibles vuelven a incrementarse durante el periodo estival. Se repetirá lo de todos los años. "A mayor demanda, subida en el precio del carburante", explica el presidente de la Confederación de Estaciones de Servicio (CEEES) a El Heraldo.
Habrá un aumento, que en principio será "moderado". En declaraciones a dicho diario indica "que no me atrevo a concretar cuánto". Sobre todo "porque no se ha cumplido ninguna de las previsiones que dimos desde el sector para este invierno".
Se dieron las circunstancias precisas para contener las tarifas en nuestro país. "Ni la demanda de China ha sido la esperada ni tanto el frío de invierno, lo que ha hecho que la necesidad en otros países tampoco aumentase", cuenta. Eso también se dejó notar en los precios, que no sufrieron ese incremento tan importante que "se veía venir".
Jorge de Benito Garrastazu confía en que "se mantenga esta tendencia de precios" durante las próximas semanas. Recuerda que a las propias estaciones de servicio también les interesa que los costes se mantengan controlados. "La gente se anima a gastar más y las estaciones ganan por litro vendido, no tienen un porcentaje en función del precio", aclara.
Desde la patronal de las gasolineras detectan que la gente sigue desplazándose bastante por ocio. Sin embargo, estas empresas no han conseguido todavía recuperar las cifras previas a la pandemia. Avisan que resultará "muy difícil" alcanzar esos números.
Explica que "la covid nos ha hecho cambiar muchos hábitos de vida y los desplazamientos por motivos de trabajo se han restringido". En su opinión, muchas empresas han puesto en marcha nuevos métodos para realizar sus tareas. Se ha descubierto que "se pueden hacer cosas sin tanto viaje y las videoconferencias han venido para quedarse".
Confía en que será un buen verano para el sector
El sector se muestra un tanto pesimista tras los datos de los últimos tiempos, con una contención en el consumo de carburante. En cualquier caso, confían en que el verano resulte positivo, porque "el sector lo necesita". No consiguió recuperarse de los efectos de la pandemia y aún "no existe la demanda que tendría que haber".
De hecho, cree que regresar a "la cifra de negocio de 2019 va a ser complicado". El presidente de la patronal de estaciones de servicio muestra su preocupación por la situación que atraviesan. "Los motores son mucho más eficientes ahora, con lo que consumen menos", indica.
Si a esto se le suma que en España se siguen "abriendo gasolineras todos los años", el problema se agudiza. La "media de ventas hace 15 años era de 3,8 millones, ahora se sitúa en 1,6 o 1,7 millones", desvela.