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Una mano con un guante rosa limpia con una esponja el interior del microondas

Los 7 trucos más fáciles para limpiar el microondas por dentro en pocos minutos

Limpiar el microondas es muy importante

El microondas se encuentra hoy en día en casi todas las casas. Además, es uno de los electrodomésticos más utilizados, pero pocas veces se nos enseña como limpiarlo. Por eso en numerosas ocasiones permanecen restos de comida o malos olores. Con estos 7 trucos sencillos de aprender e implementar conseguirás un microondas más limpio.

Utiliza algo húmedo para limpiar el microondas

Para iniciarse en el mundo de la limpieza de microondas, el paso más sencillo es usar algo humedecido. Es la opción más fácil y sin emplear prácticamente productos. Así pues, solo necesitas mojar la bayeta en agua tibia o caliente. Aunque parezca muy simple, el paño húmedo consigue llegar a todos los rincones del microondas y quitar la grasa acumulada.

Una mano con un gante rosa moja un trapo de color verde en un recipiente con agua y jabón
Para que un microondas más limpio este será tu mejor aliado | LND
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Truco bonus para limpiar el microondas

Si se quiera una mayor eficacia, antes de repasar el microondas se le pueden añadir unas gotas de jabón. Pero cuidado, es importante que al pasar la bayeta no quede ni rastro. En caso de que esto suceda se debe retirar el producto sobrante y asegurarse de que no quede ningún producto de limpieza.


Agua, vinagre y sal

Este método lo puede hacer prácticamente todo el mundo con únicamente tres ingredientes muy conocidos. Primero debemos mezclar 250 mililitros de agua, que equivalen a 1 vaso, y 2 cucharadas soperas de vinagre. En segundo lugar, añadimos una cucharada pequeña de sal. Seguidamente, lo metemos todo en el microondas durante unos 3-5 minutos y esperamos unos minutos antes de abrir la puerta.


Cuando puedas abrir tu electrodoméstico retíralo todo con cuidado de no quemarte. Finalmente, retira la suciedad y el agua que haya.

Truco bonus: zumo de limón

Dos limones, uno entero y el otro partido por la mitad, encima de una esponja verde
Si quieres una alternativa al vinagre prueba con el limón | LND

Para un microondas con un olor más fresco, puedes hacer unas modificaciones al consejo anterior. Por ejemplo, verter 2 vasos de agua, en lugar de 1, y cambiar el vinagre por el zumo de medio limón.

Jabón para lavavajillas

Otra opción es utilizar otros productos de limpieza que sean eficaces. Cabe decir que algunos son corrosivos y pueden afectar a tu microondas. No obstante, el líquido para el lavavajillas es una excelente opción.

Así pues, prepara una mezcla de agua tibia enjabonada. Humedece una esponja con la mezcla del bol y ya podrás limpiar el microondas.

Bicarbonato

También se ha demostrado que para la limpieza el bicarbonato es un producto efectivo. En muchos casos podemos recuperar sartenes u ollas quemadas si las higienizamos con él. De hecho, el bicarbonato puede ser muy versátil, ya que nos permitirá limpiar tanto el interior del microondas como su exterior.

 


Este truco consiste en espolvorear un poco de bicarbonato por encima de una esponja. Esta última tiene que estar húmeda para facilitar la absorción del producto. Una vez hecho esto, se puede pasar la esponja por todo el microondas.

Para finalizar, es importante enjuagar el electrodoméstico con un paño o una bayeta. Así se retirará el bicarbonato sobrante y obtendremos un acabado limpio e higiénico. ¡Nuestro electrodoméstico quedará más que limpio y podremos disfrutar nuevamente de nuestras comidas calientes!

El plato también se tiene que limpiar

En todos los trucos se da por hecho que también se higieniza el plato del microondas. Pero en muchos casos no es suficiente solo pasar un trapo húmedo por encima. De hecho, la suciedad también se acumula en el aro y las ruedas de debajo.

Una mano saca el plato del microondas de su sitio
Es importante lavar todos los rincones del microondas, incluso el plato | LND
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Por lo tanto, es fundamental sacar el plato con cuidado y fregarlo con un estropajo, como si fuese un plato de la vajilla. En el caso de las ruedas y el aro los podemos limpiar con la técnica del paño o bayeta húmedos, ya que con ellos llegaremos a los rincones más pequeños.