La terapia ocupacional (OT) representa una perspectiva holística que asegura el desarrollo de las personas con algún tipo de discapacidad. Un terapeuta ocupacional puede trabajar en colegios, centros de día, ambulatorios y hospitales o en domicilios privados, siendo siempre el desarrollo y la mejora del bienestar del individuo su objetivo principal como profesional de la salud.
A continuación vamos a explicar qué es la terapia ocupacional y qué tipo de rol corresponde a los terapeutas, así como qué conocimientos debe presentar un terapeuta ocupacional y cuáles son los ámbitos de trabajo generales de esta disciplina.
¿Qué es la terapia ocupacional (OT)?
La terapia ocupacional (occupational therapy o simplemente “OT” en inglés) es definida como un enfoque de mirada multidisciplinar. Este enfoque está centrado totalmente en el paciente y se basa en el desarrollo óptimo de la persona mediante el aprendizaje de habilidades que lo fomenten.
La terapia ocupacional es una profesión que puede incluirse dentro del ámbito de la salud y que consiste en ayudar a personas con enfermedades físicas o mentales incapacitantes, así como a individuos con lesiones u otros problemas generales de salud.
Las personas pueden beneficiarse de la terapia ocupacional en cualquier momento de su vida, es decir, no hace falta ser una persona mayor o tener algún grado de discapacidad para necesitar este tipo de tratamiento. La OT se centra en la mejora de las habilidades necesarias para poder realizar tareas cotidianas necesarias y/o actividades en el hogar, en el trabajo o en el colegio.
Los ejemplos de aquellas actividades que pueden realizarse desde la OT incluyen ayudar a realizar tareas como marcar un número de teléfono, utilizar un ordenador, escribir y conducir, entre otras muchas tareas de la vida diaria.
Anteriormente los terapeutas ocupacionales empezaron a surgir durante la Primera Guerra Mundial y su trabajo consistía en asistir a soldados que sufrían shocks emocionales a causa de lesiones graves y amputaciones debidas a la guerra. Asimismo, a principios del siglo XX los terapeutas ocupacionales trataban a personas con tuberculosis y poliomielitis.
El rol del terapeuta ocupacional
Actualmente el rol del terapeuta ocupacional es muy variado y amplio. Durante las últimas décadas los terapeutas ocupacionales han tratado a pacientes con discapacidades físicas y del desarrollo, tales como lesiones cerebrales, lesiones de la médula espinal, patologías y afecciones causadas por estrés continuado, accidentes cerebrovasculares (ACV), pacientes con enfermedades neurodegenerativas como la de Alzheimer o la de Párkinson, diabetes mellitus y el trastorno por déficit de atención (en niños sobre todo), entre otras patologías.
Asimismo, hoy en día el terapeuta ocupacional también se ocupan de personas con discapacidad visual, psicopatologías y otras áreas como la consultoría ergonómica y la modificación del hogar en función de las características y de las necesidades de la persona.
A través de las evaluaciones de las actividades de la vida diaria, el terapeuta ocupacional determina cuán independiente es un cliente al realizar sus tareas diarias en el hogar, en el trabajo y dentro de su entorno social.
Después de la evaluación, un terapeuta ocupacional puede implementar una intervención para facilitar un estilo de vida más independiente. El objetivo de los terapeutas ocupacionales es facilitar la independencia física del paciente. Una forma de hacerlo es implementando ejercicios que ayuden a la movilidad, por ejemplo.
Los terapeutas ocupacionales también pueden facilitar intervenciones que ayuden a los pacientes, como aquellos con discapacidades del desarrollo o en entornos de salud mental, a funcionar a diario, como el manejo del estrés y las habilidades de comunicación.
Conocimientos clave y objetivos
Según Kielhofner (2006), un terapeuta ocupacional debe tener múltiples conocimientos especializados. En primer lugar, el objetivo principal de un terapeuta ocupacional es trabajar constantemente para el desarrollo completo de la persona.
También deben saber cómo aumentar la capacidad limitada en actividades del paciente mediante el empleo de un equipamiento especializado y la modificación del entorno para poder maximizar las funciones disminuidas de la persona.
Asimismo deben tener en cuenta la importancia de las creencias de una persona acerca de su capacidad y sus intereses personales en la relación de las tareas.
Por ello, los terapeutas ocupacionales deben saber conocer estos dos factores para poder incidir en ellos de forma implícita y explícita. Finalmente, también es necesario conocer cómo identificar las actividades y tareas más críticas para el paciente.
La máxima del terapeuta ocupacional debe ser siempre ocupar a la persona en actividades significativas para ella y de esta manera fomentar su bienestar general. Para ello deben poner énfasis en el respeto a los deseos de la persona y a sus capacidades particulares.
Ámbitos de trabajo principales
Los profesionales de terapia ocupacional pueden trabajar en una variedad de entornos, dado que el alcance de su práctica puede ser muy variado. Los entornos de trabajo tradicionales son el cuidado a largo plazo de pacientes, los centros de enfermería especializada, las clínicas ambulatorias y otros centros médicos y para personas mayores, en los que los profesionales brindan atención directa a pacientes con problemas físicos y de desarrollo (p. ej. artritis, demencias y lesiones físicas).
Los terapeutas ocupacionales también trabajan en centros de salud mental, agencias de atención domiciliaria, en entornos comunitarios y, en la práctica privada. Independientemente del entorno donde trabaje el profesional, el enfoque de este debe centrarse siempre en las necesidades del paciente y del entorno en el que vive.
Finalmente, muchos terapeutas ocupacionales trabajan con niños en sistemas escolares. El enfoque de un terapeuta en un entorno educativo puede consistir por ejemplo en implementar un programa individualizado de intervención de escritura a mano, con el objetivo de mejorar la destreza de la motricidad fina en niños pequeños.
Referencias bibliográficas:
Gourley, M. M. (2002). Occupational Therapy. In K. Krapp (Ed.), The Gale Encyclopedia of Nursing and Allied Health (Vol. 3, pp. 1744-1747). Detroit: Gale.
Kielhofner, G. (2006). Fundamentos conceptuales de la terapia ocupacional. Editorial Médica Panamericana.