El Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) estará muy pendiente de lo que haga un determinado colectivo. En concreto aquellos que sean perceptores del subsidio para mayores de 52 años. Podrían poner en serio peligro la obtención de dicha ayuda en el caso de reclamar el cheque anticrisis de 200 euros.
El Gobierno sacó adelante el pago de este dinero el pasado mes de diciembre. Se planteó como una medida para contrarrestar el impacto del conflicto de Ucrania en las economías domésticas. No hay que olvidar que la inflación cerró 2022 con un incremento del 8,5%.
Dicha ayuda se planteó principalmente para asalariados, autónomos y desempleados que percibieran algún tipo de prestación del paro. Además, debían de cumplir una serie de exigencias en cuanto a ingresos y patrimonio. El dinero en total que percibiera la familia en conjunto al término del año no debía estar por encima de los 27.000 euros.
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En cuanto al patrimonio, tampoco podía superar los 75.000 euros excluyendo de este cómputo la vivienda habitual. El cálculo de los ingresos y del patrimonio se realiza sumando el de todos los miembros del núcleo familiar que tengan el mismo domicilio. Esto hace referencia al solicitante, cónyuge, descendiente y ascendientes de hasta segundo grado.
En este sentido, los más beneficiados serán los que compartan residencia y entre ellos no exista ningún tipo de vínculo familiar. Es lo que ocurre en el caso de las parejas que no están registradas como tal o los compañeros de piso. Cada uno de ellos podrá solicitar el cheque de manera independiente, por lo que tendrán más posibilidades de acceder a la ayuda.
¿Cómo afecta a los mayores de 52 años que cobren el subsidio?
Entre los colectivos que también podrán solicitar la ayuda de 200 euros se encuentran los beneficiarios del subsidio para mayores de 52 años. Pero deberán de tener cierto cuidado, ya que el Servicio Público de Empleo estará muy pendiente de todo esto. Sobre todo porque no pueden superar un límite en cuanto a ingresos, ya que de lo contrario perderían el derecho a cobrar esa paga.
En la actualidad, los que perciben este subsidio ingresan 480 euros al mes. Con la entrada del nuevo año hubo una ligera mejora aprobada por el Gobierno. Es cierto que este tema ha generado bastante debate, pero también muchas dudas entre los perceptores del mismo.
Para aclarar estas cuestiones, el SEPE también ha desvelado en qué punto se encuentra la situación. Indican que al ser un pago único de 200 euros, habría que repartirlo entre doce meses. En el momento en que lo obtenga, se le imputaría al beneficiario la parte que corresponda de ese mes, que alcanzaría los 16,6 euros.
No puede rebasar el 75% del Salario Mínimo Interprofesional
Explican desde el organismo público que "el resultado de esta operación es necesario". Les permitirá conocer "si se sigue cumpliendo el requisito de carencia de rentas de ese mes". Debe encontrarse por debajo del 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).
En estos instantes, esta cifra se situaría en los 810 euros. En el caso de añadirle esa cantidad mensual y que no la superase, entonces no habría inconvenientes. ¿Pero qué ocurriría de rebasarla?, se preguntan muchos.
De ser así "se suspendería la prestación de ese mes. Se podría reanudar, a petición del interesado, si en los meses siguientes se cumple ya con la exigencia de la carencia de rentas", añaden.
Una vez finalizados los 12 meses desde la aprobación del subsidio hay que aportar este documento de declaración de renta. Se utilizará el mismo periodo de tiempo desde que se reanude. De no presentarlo en los plazos fijados implicará la interrupción de su pago, así como de la cotización a la Seguridad Social.