¿A quién no le gusta el salmón? Se trata de un alimento saludable, por su contenido en grasas saludables, además de ser proteico y de textura suave y sabor exquisito. Pero hay un problema: es posible que el precio suba próximamente.
El salmón es una especie valorada por su carne, que es rica en proteínas y ácidos grasos omega-3. La carne del salmón también es una buena fuente de vitaminas y minerales, como la vitamina D y el selenio.
Existen varias especies de salmón, como el salmón salvaje y el salmón criado en granjas. El salmón salvaje es considerado más beneficioso para la salud debido a su contenido de ácidos grasos omega-3 y su menor cantidad de contaminación.
El salmón criado en granjas, puede tener menos contenido de omega-3 y más contenido de sustancias químicas, como el mercurio. Por lo que hay que saber escoger muy bien la opción en el supermercado.
En este sentido, recientemente hemos sabido que existe cierto riesgo de que sus precios se eleven de forma alarmante. ¿Qué debemos saber sobre ello y qué tenemos que tener en cuenta?
¿Qué puede ocurrir próximamente con el precio del salmón?
Recientemente se ha aprobado un nuevo impuesto por parte del Gobierno de Noruega, el cual entraría en vigor el próximo año. Se trataría de un impuesto que afectaría a los productores de salmón, que amenazaría con un notable incremento de su precio próximamente.
De acuerdo a los expertos, se trata de un impuesto sobre los recursos para el cultivo tanto del salmón como la trucha del 40 por ciento desde principios de 2023, especialmente para aquellos volúmenes que superen entre los 4.000 a las 5.000 toneladas (si fueran inferiores quedarían exentas).
Lo cierto es que entre un 60 a un 70 por ciento de las empresas del sector en el país se encontrarían por debajo de esta cantidad. Sin embargo, las grandes compañías, que sí la superan, se han visto afectadas por este impuesto en la bolsa, sufriendo pérdidas.
¿Bajará la demanda de salmón?
Por el momento, no se sabe muy bien qué ocurrirá con el precio del salmón en pescaderías y supermercados. Y cómo este impuesto podría afectar al consumidor respecto al precio final de producto. Y es que a nadie se le escapa que Noruega es uno de los mayores importadores de salmón.
En este sentido, los expertos creen que podría registrarse un precio superior, con el que las compañías más grandes puedan hacer frente al coste de sus impuestos; o una reducción de la inversión, lo que reducirá la oferta.
Sea como fuere, ambos factores tenderán a afectar negativamente los precios de los productos. Especialmente cuando, además, aparece un producto que pueda sustituirlo, en un contexto en el que la inflación —como sabemos— se encuentra disparada.
¿Qué ocurrirá en nuestro país?
Siguiendo con el análisis, los expertos mencionan que nuestro país podría verse afectado por esta medida de manera indirecta. Y es que, según una encuesta de Ipsos, alrededor del 79 por ciento de los españoles aseguraba haber consumido este pescado en los últimos seis meses. Y el 50% había comido sashimi o sushi elaborado con salmón en este período de tiempo.
De hecho, el salmón que llega desde Noruega es uno de los que más se consume, puesto que es el líder absoluto con al menos 1,4 millones de raciones diarias. Por tanto, habrá que esperar para comprobar qué podría ocurrir en los próximos meses con este delicioso, sabroso y nutritivo alimento.