Las nuevas Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) podrían tener los días contados. Apenas dos meses después de su aplicación en las ciudades españolas de más de 50.000 habitantes, ya han surgido los primeros contratiempos.
Tras su repentina llegada el 1 de enero de 2023, las ZBE se han convertido en un auténtico dolor de cabeza para muchos conductores. Algunos de ellos se han tenido que apresurar a conseguir la etiqueta ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT) y, otros, directamente han tenido que acatar las normas de restricción, quedándose sin poder circular libremente por sus propios municipios.
No obstante, parece que la reciente normativa podría desaparecer en cualquier momento, como ya ha ocurrido en Gijón (Asturias).
Las ZBE en el punto de mira
El Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) ha derribado la Ordenanza de Movilidad Sostenible de Gijón por no cumplir con las condiciones legales. El motivo recae en la falta de una memoria económica que reúna los presupuestos derivados de dicha ordenanza.
Esto ha supuesto la anulación de las limitaciones de tráfico en la ciudad para los vehículos más contaminantes, aquellos sin acceso a las ZBE. Aunque se trata de un caso concreto, no sería de extrañar que pueda extenderse a las demás localidades implicadas en la nueva medida.
Lo que recoge la sentencia del TSJA
Según ha detallado Europa Press, la sentencia del TSJA sobre las ZBE en Gijón argumenta la falta de información y datos específicos acerca del nivel de contaminación en la ciudad. Así como recalca que carece de "perspectivas de futuro, criterios de comparación, influencias económicas concretas y su traducción en orden al equilibrio de ingresos y gastos, informes técnicos...".
De la misma manera, el Tribunal Superior echa en cara que las exigencias de la normativa pueden acarrear un gasto casi obligatorio por parte de los usuarios que cuentan con un vehículo sin etiqueta autorizada.
En este sentido, el TSJA mantiene que el cambio del vehículo puede tener efectos sobre los precios pactados "en los que incide la restricción de la Ordenanza cuando se utilizan vehículos que reúnen las características técnicas de la contratación, pero que carecen de distintivo ambiental".
La suspensión de las ZBE podría extenderse
La resolución del TSJA no solo perjudica a la ciudad de Gijón, sino que cabe la posibilidad de que pueda hacer tambalear la normativa propuesta por el Estado.
En el caso de que el ayuntamiento de Gijón recurra la sentencia, el Tribunal Supremo deberá dictaminar una respuesta firme y determinante acerca de la Ley de las ZBE. Sin embargo, esta decisión queda a la espera de lo que pueda ocurrir en los próximos días.
Multa de 90 € por no llevar la etiqueta de la DGT
La ciudad de Gijón ha sido una de las primeras en instalar ZBE dentro de su espacio urbano. Así mismo, su severa normativa no ha estado exenta de polémica.
El ayuntamiento obligaba a llevar la etiqueta de la DGT a todos los coches que circulaban por las zonas de tráfico limitado. La multa para los que quebrantaban la norma era ni más ni menos que de 90 euros.
Cabe destacar que, aunque se trata de una ley impuesta por el Gobierno, son los propios ayuntamientos los que establecen las restricciones y medidas pertinentes. Así pues, mientras en Gijón se pagaba una cuantía exagerada por no llevar la pegatina, en Madrid esa tasa es de 20 € y, en Barcelona, ni siquiera hay multa.
No obstante, la sanción por acceder a una ZBE sin autorización es siempre la misma: independientemente de la ciudad en la que se encuentren, los infractores se exponen a una multa de 200 €.