Si hay una cadena low cost que destaque por encima de las demás, esa es Primark. La cadena de origen irlandés es todo un referente, sobre todo en Europa, en lo que concierne al mundo del retail.
No obstante, cuenta con una clara "desventaja" en comparación a sus competidores más directos. Y es que, pese a las numerosas peticiones por parte de sus clientes, la cadena fundada en 1969, no cuenta con la posibilidad de comprar online.
¿Veremos por fin una tienda Primark online?
Tras las insistencias de los clientes, Primark por fin ha respondido a la pregunta que ronda la mente de muchos. Y es que, según sus declaraciones, por el momento, la cadena de ropa y decoración no tiene planeado abrir ningún tipo de tienda que se aleje de la venta "tradicional".
Como ellos mismos han declarado, la cadena se considera un minorista de calle principal, por lo que la venta online no acaba de encajar con la imagen que quieren ofrecer. Asimismo, Paul Merchant, el CEO de Primark, ha confirmado ser un gran admirador del comercio que se centra en la calle. De este modo, asegura que desde la cadena "creemos apasionadamente que una próspera zona comercial local beneficia a todos en la comunidad".
Por si fuera poco, el director ejecutivo de Primark también ha especulado sobre qué supondría un canal online para la cadena. Según sus declaraciones en el Financial Times, considera que este tipo de venta sería perjudicial para el margen de beneficio de la cadena, teniendo en cuenta el tamaño de una cesta media online.
De modo que, por el momento, los clientes tendrás que conformarse con los establecimientos de compra física de la cadena. En España, por ejemplo, Primark ya cuenta con 56 tiendas distribuidas por el país, y no se descartan futuras nuevas aperturas.
La cadena ya puso a prueba el e-commerce
Aunque a día de hoy Primark no se replantee la venta online, lo cierto es que la cadena ya probó suerte con este tipo de venta el año pasado. Durante unos meses, 25 tiendas ubicadas en Inglaterra y Gales tuvieron disponible un servicio de comprar online, pero con recogida en tienda (click and collect).
Para ello, los clientes podían comprar diversos productos —únicamente artículos infantiles— e ir a recogerlos en tienda pasados dos días desde el momento de la compra. El único requisito era gastar un mínimo de 15 libras.
No obstante, llegaron a la conclusión de que la venta online sin click and collect "es un servicio muy caro, ineficiente y medioambientalmente dudoso", en palabras del director ejecutivo. Al fin y al cabo, sus precios tan bajos no pueden hacer frente a los costes asociados al transporte y la distribución de las compras.
Primark apuesta por otro tipo de estrategias
A pesar de que la noticia caiga como balde de agua fría a muchos clientes, la cadena cuenta con un as bajo la manga para contentar a los clientes. Al parecer, han puesto en marcha una estrategia de sostenibilidad con intención de mejorar su impacto en el medio ambiente.
Para 2030, esperan haber reducido considerablemente la producción de residuos, así como su emisión de carbono. Además, están estudiando la posibilidad de diseñar productos con materiales reciclados, reduciendo así su huella ambiental. Todo ello, sin que el precio medio de sus productos se vea comprometido por estos cambios.
La principal motivación para conseguirlo es que los usuarios puedan reciclar todos los productos que compren, una vez haya llegado el fin de su vida útil. Por ello, es cada vez más común encontrar prendas con la etiqueta Primark Cares, la cual indica que es el resultado de su compromiso ético con el medio ambiente.