El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, anunciaba recientemente alguno de los compromisos que estaba dispuesto a asumir de salir reelegido. Uno de ellos hace referencia a una cierta mejora de los salarios de los trabajadores españoles.
Durante un acto político celebrado en la localidad sevillana de La Rinconada prometía un incremento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Su intención es que alcance hasta el 60% del sueldo medio del país.
En estos instantes, el SMI se eleva hasta los 1.080 euros brutos al mes distribuidos en 14 pagas. Por lo tanto, al año se traduciría en 15.120 euros brutos, como recoge el Real Decreto 99/2023 de 14 de febrero.
Pero de llevarse a cabo los planes de Pedro Sánchez, el salario mínimo experimentaría una importante subida. Hay que tener en cuenta que el sueldo medio bruto en nuestro país, según la Seguridad Social, se sitúa en los 2.106 euros brutos.
Si tomamos como referencia dicha cantidad, habría que aumentar el SMI hasta los 1.263 euros al mes, que corresponderían al 60%. Las primeras reacciones no se hicieron esperar y llegaron desde las filas de Podemos, apunta El Periódico.
La ministra de Derechos Sociales en funciones, Ione Belarra, reclamó al presidente en funciones que fuera más ambicioso. De hecho solicitó un esfuerzo para elevarlo hasta los 1.500 euros mensuales.
Entienden que sería lo más justo después del importante esfuerzo que están realizando las familias en los últimos tiempos. Inciden en el enorme sacrificio que realizan ante "los altísimos precios de los alimentos" y unas hipotecas "carísimas".
¿Cómo se determina el Salario Mínimo Interprofesional?
El Salario Social Interprofesional se suele revisar de forma anual y es el Gobierno el encargado de hacerlo. Para ello tiene en cuenta las aportaciones de los sindicatos y de la patronal. Pero también se valoran otros detalles como la coyuntura económica, la inflación y la productividad media del país.
Se aplica a todos los trabajadores independientemente del tipo de contrato o de sector al que se dediquen. Es necesario que no se encuentren incluidos en un convenio colectivo en donde los sueldos no estén por encima del SMI. De lo contario se aplicaría lo que aparezca en dicho convenio.
La evolución del SMI en los últimos tiempos
El SMI no equivale al salario base, ya que se contemplan todos los conceptos de la nómina. Se trata, en realidad, de la cuantía que debe percibir un empleado en España de forma legal.
A lo largo del último lustro ha experimentado un aumento considerable. En 2018 apenas llegaba a los 735 euros mensuales brutos, pero en 2023 ya alcanza los 1.080 euros. Esto supone una mejora del 47%.
La cantidad a la que se refiere el salario mínimo será siempre bruta, por lo que habrá que descontar distintos aspectos. Entre ellos las retenciones del IRPF y las cotizaciones a la Seguridad Social, recoge Banco Santander en su blog. Todo ello daría como resultado el sueldo neto que se situaría por debajo de los mil euros.
España se encuentra en un punto intermedio si lo comparamos con el resto de países europeos. Hay mucha diferencia entre los 2.387 euros de Luxemburgo hasta los 399 euros de SMI de Bulgaria.
Países como Alemania o Francia se encuentran a un nivel muy superior respecto a nosotros. Los primeros lo tienen fijado en los 1.987 euros, frente a los 1.709 euros de los galos. Eslovenia, por su parte, lo eleva hasta los 1.203.
Por debajo de los 1.000 euros destacan países como Grecia, Polonia o Portugal. La subida que promete Pedro Sánchez parece interesante a simple vista, pero debe de convencer a los distintos actores sociales. Entre ellos, sindicatos, empresarios y sus posibles socios de Gobierno una vez que lo conforme.