El verano está a punto de comenzar. El sol empieza a pegar fuerte y el tono bronceado es el más aclamado por muchos durante la época estival.
Los polvos bronceadores son el cosmético estrella del verano. Si estás morena potencian el bronceado y si no lo estás no te preocupes porque te ayudarán a lucir una piel radiante.
A la hora de elegir el tono más adecuado, el experto Eliecer Prince, make up artist de ‘Guerlain’, aconseja seguir la máxima «menos es más para conseguir un resultado natural, así que lo ideal es elegir un tono similar al de nuestra piel e ir regulando la intensidad con la cantidad de aplicaciones. Es preferible realizar varias pasadas del polvo bronceador en nuestro tono que utilizar un tono más oscuro, ya que el resultado será poco natural».
Para aplicarlos lo fundamental es elegir una buena brocha y extenderlos haciendo movimientos circulares. Si quieres añadir un toque de luminosidad al acabado, puedes aplicar después un iluminador.
¿Bronceado natural o a base de polvos?
Son muchos los famosos que hacen gala de su bronceado estos días. Pero no todos tienen que ver con una larga exposición al sol. La última en sorprendernos ha sido la reina Letizia. Hemos podido verla morena, con los pómulos marcados con polvos de sol y el escote notablemente más bronceado.
La piel de la ex periodista ha pasado de tener un tono pálido a un efecto ‘besado por el sol’ en cuestión de semanas. Y es que la reina ha decidido ponerle remedio a esa piel apagada con la llegada de las altas temperaturas.
Además de los reglamentarios polvos bronceadores para marcar el pómulo, difuminados en los ángulos estratégicos, Letizia resalta las mejillas, la frente y el tabique de la nariz para que su rostro parezca todavía más bronceado.
Pero no todo en el recién estrenado look bronceado de la reina es maquillaje. El resto de su cuerpo también ha ido adquiriendo un tono dorado en las últimas semanas. Esto podría explicar el tono rojizo con el que pudimos verla los primeros días de sol en la zona del cuello y el escote. Y es que las primeras exposiciones al sol deben hacerse siempre con una fotoprotección alta.