La primavera supone una época complicada para un gran número de españoles. Pese a la llegada del buen tiempo y el renacimiento de la naturaleza, alrededor de un 20% de la población española lo pasa fatal. Esto se debe, principalmente, a la alergia, que año tras año convierte en pesadilla a cualquier mínimo paso fuera de casa.
La Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) ofrece la posibilidad de conocer los niveles ambientales de pólenes en el territorio español. Esta medida puede ser útil si te preocupa la cantidad de polen que hay en la zona que habitas. De todas formas, los expertos se ponen de acuerdo en las plantas y árboles de los que deberías alejarte al máximo...
Plantas y árboles que deberías evitar a toda costa esta primavera
Las siguientes 10 plantas y árboles cuentan con un número muy alto de polen, así que trata de evitarlas siempre que puedas:
1. Plátanos de sombra
Su presencia es bastante común en las ciudades mediterráneas y aunque su nombre pueda ser confuso, no produce plátanos. El principal problema del plátano de sombra es que, para los alérgicos, no solo es peligroso su polen.
También lo es la pelusa de sus brotes e incluso los vilanos de sus semillas. Se debe tener en cuenta que su polinización se produce entre marzo y abril, pero especialmente en este último.
Solamente en Madrid podemos encontrar 40.000 ejemplares, así que es probable que tu ciudad también cuente con un gran número de ellos. Algunos de los síntomas que provoca su polen en los alérgicos son: conjuntivitis, rinitis y picor o molestias en la garganta.
2. Olivo
Aunque el origen del olivo es asiático, este árbol nos resulta muy familiar. Su polinización empieza en mayo y termina en junio, así que si padeces alergia intenta mantenerte alejado de estos árboles durante esos meses. Es importante conocer que ser alérgico a su polen no te convierte en alérgico a sus frutos, es decir, a las aceitunas.
La alergia al polen del olivo es la segunda alergia primaveral más común en España. En nuestro país se contabiliza que hay aproximadamente 308,9 millones de olivos. Es una cifra bastante alta en comparación a la de otros árboles.
Su presencia se centra en la cuenca del Mediterráneo y en el Sur, zonas muy pobladas, por lo que esquivarlos se hace complicado.
3. Aligustre
El aligustre es un arbusto que mide casi 3 metros y es muy frecuente en los núcleos urbanos. No solo resulta peligroso por su polen, sino también por su fruto (bayas de color negro). Estas bayas, aparte de tener un sabor amargo, son tóxicas.
Su hoja es muy parecida a la del olivo, pero algo más ancha, y adoptan diferentes tonos de verde.
4. Gramíneas
Las gramíneas son una familia de plantas muy presente en nuestro día a día, pues un gran número de especies (unas 12.000) forman parte de ella. Cuentan con una gran capacidad de adaptación, por lo que es usual encontrarse casi en cualquier sitio. Aunque polinizan durante todo el año, es en primavera cuando la polinización está en su punto álgido.
Algunos productos tan esenciales como el trigo, el azúcar de caña, el maíz o el arroz provienen de las gramíneas. El riesgo de sufrir los síntomas de su alergia aumentan después del cosechado, por lo que es mejor evitar los campos de cultivos siempre que sea posible.
5. Álamo
La peligrosidad del álamo no es tan potente como las demás plantas si nos fijamos en la cantidad de polen que produce. No obstante, también puede suponer un riesgo para los alérgicos.
Seguramente reconozcas la pelusa blanca que producen estos majestuosos árboles. Debes ser consciente de que se trata del vilano y no del polen (sus partículas son demasiado pequeñas para ser vistas por el ojo humano).
Crecen en todo el territorio español, por lo que es difícil huir de ellos. En contraste a las otras plantas, puedes empezar a sentir los síntomas de su alergia incluso a finales de invierno.
6. Castaño
El castaño es un árbol que puede llegar a los 30 metros y su fruta, como su propio nombre indica, es la castaña. Su polinización se produce entre abril y mayo, así que señala estos meses en tu calendario si sufres alergia.
Son abundantes en las regiones de Asturias y Galicia, pero también pueden estar presentes en otras partes de España.
7. Aliso
Se trata de un árbol que, como el castaño, puede llegar a los 30 metros de altura. Su fruta tiene la forma de una piña, pero su consumo no es muy común.
Su polinización tiene lugar entre febrero y marzo, y pueden producir grandes molestias a los alérgicos. Se pueden encontrar ejemplares en zonas húmedas y cercanas a cuerpos de agua, aunque su presencia es usual en algunos parques.
8. Encina
La encina es un árbol popular en el arco del Mediterráneo. Por suerte, su polen no supone un riesgo muy importante para los alérgicos, a diferencia de otras plantas.
No hay un gran número de ejemplares en España y, los que existen, están alejados de los cascos urbanos. Su polinización inicia en marzo y termina en mayo.
9. Abedul
Los abedules son árboles que pueden llegar a los 30 metros, pero seguramente los reconozcas por su característica corteza grisácea. Algunos estudios demuestras que los alérgicos a este polen también pueden padecer síntomas alérgicos a la ingesta o al uso de alimentos como el melocotón o la manzana.
Su polinización se centra en los meses que van de marzo a mayo, pero el peor mes para los alérgicos, es el de abril. En la Península Ibérica no es una especie muy común. La mayoría de sus ejemplares se encuentran en el norte de Europa, aunque sí que es presente en algunos parques.
10. Parietaria
La parietaria es un género de plantas con un aspecto parecido al de la ortiga, pero los pelillos que la conforman no son urticantes. Estas plantas cuentan con una altura que varía entre los 20 y 80 centímetros.
Su alergia es bastante frecuente, como en el caso de las gramíneas o el olivo. La mayoría de sus ejemplares se encuentran cerca de la costa atlántica: Galicia es la comunidad con más parietarias en España. Poliniza durante todo el año, pero los alérgicos deben prestar especial atención a los meses de abril y mayo.
¿Cómo prevenir los síntomas de las alergias?
- Evita salir de casa las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde. La polinización está en su momento cúspide durante esas horas.
- No te acerques o te sientes cerca del césped, y evita estar al lado de árboles o plantas con mucho polen.
- Cúbrete la nariz y la boca con una mascarilla. También, puedes ponerte gafas de sol para evitar estar en contacto con el polen.
- Utiliza un filtro especial en el aire acondicionado.