Llevar a cabo una correcta higiene dental resultar esencial para evitar una gran cantidad de afecciones bucodentales que pueden llegar a resultar muy molestas y dolorosas. Cepillarnos los dientes todos los días y utilizar complementos de higiene oral como seda dental o colutorios reduce considerablemente el riesgo de que estas afecciones aparezcan.
Si bien existen un gran número de condiciones bucales cuya causa es una higiene bucodental deficiente, la placa dental es la más común de todas. A lo largo de este artículo descubriremos qué es la placa dental, sus causas, tratamiento y formas de prevención.
¿Qué es la placa dental?
La placa dental es una afección o condición bucodental en la que se crea una película o masa de bacterias que crecen en las superficies de la boca, de ahí que también se conoce como placa bacteriana.
Cuando esta placa comienza a formarse lo hace en forma de depósito pegajoso e incoloro que con el paso de tiempo y una higiene bucal deficiente puede convertirse en sarro, el cual adquiere un color amarillento o marronáceo.
Comúnmente, la placa dental suele formarse entre los dientes, en la parte frontal y posterior de estos, en las superficies de masticación, a lo largo de la línea de las encías o debajo de los márgenes cervicales de las encías.
Si no se retira, la afección puede progresar y dar lugar a caries dental u otras enfermedades de las encías. En la caries dental se produce la destrucción localizada de los tejidos del diente por el ácido producido por las bacterias de los azúcares fermentables.
Otros problemas asociados o complicaciones son las afecciones periodontales como la gingivitis y la periodontitis. Este es el motivo por lo que es importante llevar a cabo una limpieza bucal para interrumpir la masa de bacterias y eliminarla.
El control y la eliminación de la placa pueden lograrse con una rutina diaria de cepillado dental. Cepillarse los dientes correctamente, dos veces al día, y utilizar dispositivos interdentales como hilo dental y cepillos interdentales son medidas preventivas muy eficaces para la placa dental.
El mantenimiento de una buena higiene dental es importante, ya que las placas bacterianas pueden volverse ácidas y causar la desmineralización de los dientes, popularmente conocidas como caries dentales. Asimismo, también puede convertirse en sarro, el cual, como ocurre con las caries, tampoco puede eliminarse solamente con el cepillado, sino solo mediante limpiezas profesionales.
¿Cuál es la causa de esta afección?
Habitualmente, la placa dental comienza a aparecer cuando los alimentos que contienen carbohidratos (azúcares y almidones), como puede ser los caramelos, dulces, refrescos o leche, se quedan en los dientes debido a una falta de cepillado y limpieza.
Las bacterias que se encuentran de manera natural en nuestra boca encuentran en estos restos de alimentos un entorno ideal para crecer, produciendo ácidos que destruyen el esmalte dental.
La placa bacteriana también puede aparecer en las raíces de los dientes, debajo de la encía, causando la ruptura del hueso que sujeta al diente.
Consecuencias de la placa dental
Tal y como se menciona en puntos anteriores, si la placa dental no se elimina frecuentemente, pueden aparecer otras condiciones clínicas más graves y mucho más molestas como la gingivitis, la periodontitis o las caries.
1. Caries
La caries dental es una enfermedad infecciosa causada principalmente por la bacteria Streptococcus mutans. La acción de esta bacteria se caracteriza por la desmineralización ácida del esmalte, la cual puede avanzar hasta conseguir el deterioro del tejido dental interno.
Aunque existen diversos factores de riesgo que aumentar las probabilidades de que aparezca una caries, los ácidos orgánicos liberados por la placa bacteriana favorecen esta desmineralización del diente.
2. Gingivitis
La gingivitis es una lesión inflamatoria que aparece como resultado de una acumulación de placa dental alrededor de los tejidos gingivales.
Las bacterias que forman la biopelícula en el tejido provocan una respuesta de inflamación localizada por parte del organismo. Los principales signos de la gingivitis son también la hinchazón y enrojecimiento de las encías y el sangrado durante el cepillado.
La gingivitis causada por esta afección puede tratarse mediante la eliminación de capa bacteriana que la forma. Sin embargo, si no se trata, la inflamación puede afectar a los tejidos de soporte dando lugar a una periodontitis.
3. Periodontitis
En cuanto a la periodontitis, consiste en una infección de las encías que provoca la destrucción del hueso alrededor de los dientes en la mandíbula. Como hemos visto, la periodontitis suele ser consecuencia de una gingivitis no tratada.
La acumulación de placa dental hace que las bacterias liberan enzimas que atacan al hueso y causan el quiebre de este. Al mismo tiempo, el osteoclasto (una célula de los huesos) descomponen el material óseo de la mandíbula.
¿Cómo tratar y prevenir la placa bacteriana?
Existen diferentes maneras para eliminar la placa bacteriana de los dientes. La principal es el cepillado acompañado de hilo dental o, por otra parte, exponer la placa a elementos o ingredientes antibacterianos para matar las bacterias y evitar que estas vuelvan a crecer.
Algunos de los consejos tanto para tratar como para prevenir la placa dental son:
Mantener una rutina de cepillado de dientes que dure, al menos, 2 minutos de duración. Repetir el cepillado entre dos y tres veces al día, todos los días.
Utilizar hilo dental para eliminar las bacterias y la placa que queden entre los espacios de los dientes.
Utilizar pasta de dientes con fluoruro antiplaca.
Recurrir a los enjuagues bucales con propiedades antibacterianas.
Visitar la consulta del dentista o higienista dental cada 6 meses para realizar un chequeo rutinario y una limpieza dental.
Limitar la ingesta de dulces y alimentos y bebidas ácidas, así como mantener una dieta variada y equilibrada.
Referencias bibliográficas
Chetrus, V. & Ion, I. R. (2013). Dental Plaque – Classification, Formation, and Identification. International Journal of Medical Dentistry, 3:139–143