Confiar en una futura jubilación parece, cada vez más, un sueño muy lejano, y aún más recibir una pensión suficiente como para poder vivir sin demasiadas preocupaciones económicas. La precariedad laboral, el tipo de trabajo o el aumento de la esperanza de vida son algunas de las causas de que la edad mínima de jubilación o la cuantía de la paga se hayan visto modificadas.
El aumento de la inflación en España, además de incrementar los precios, desde los productos de primera necesidad hasta la electricidad, tampoco ha ayudado a tranquilizar a pensionistas y jubilados, cuyas pensiones muchas veces son su único sustento económico.
El Gobierno anuncia las posibles medidas sobre las pensiones para los próximos meses
Sin embargo, la nueva información revelada por el Gobierno arroja algo de esperanza para los futuros y actuales pensionistas y jubilados. Como ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá ha anunciado las novedades que se espera empezar a aplicar sobre las pensiones para los próximos meses.
Una de ellas, y que involucra a todas aquellas personas que pretendan jubilarse para 2023, tiene que ver con el periodo a tener en cuenta para calcular la pensión. Escrivá ha adelantado que este periodo se mantendrá en los 25 años, y que, por lo tanto, no ascenderá a los 35 años, como se venía especulando.
Además, ha querido proponer algunas medidas con el objetivo de excluir años o mejorar aspectos en la cotización. "Hay que elevar progresivamente la pensión máxima y aumentar la cotización de la base máxima. Si lo hacemos de forma gradual, aumentará la recaudación en términos de cotizaciones sociales", ha explicado en una entrevista para RNE.
Lo que pasará con las pensiones a partir de noviembre
Tal y como se establece en la legislación, las cuantías de las pensiones vienen determinadas por la inflación media, por lo que se actualizan regularmente. Dicha actualización se realiza conforme el IPC, aunque este se encuentre en valores nunca antes vistos.
No obstante, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguraba esta semana pasada que "nunca más un pensionista perderá poder adquisitivo en la actualización anual". Unas afirmaciones que, aunque no parecen encajar con el actual contexto de inflación, otras autoridades han corroborado.
El mismo Escrivá ha subrayado que los ingresos de la Seguridad Social están aumentando. Concretamente, se refería al repunte del 8,5% que en julio mejoró las cotizaciones sociales. En palabras del ministro: "El saldo entre ingresos y gastos lo único que refleja es una mejora de la situación. Está en una ley que se aprobó en el Parlamento para dar total certidumbre a los pensionistas".
Requisitos para cobrar una buena pensión en España
La Seguridad Social exige a todo aquel que pretenda percibir una paga mensual cumplir con una seria de requisitos. El primero de ellos es haber cotizado durante un periodo mínimo de 15 años. Sin embargo, para que esto último tenga validez, al menos dos de esos 15 años cotizados deben estar comprendidos en los 15 años previos a la jubilación.
Las personas que no cumplan con este requisito previo también tienen derecho a cobrar una pensión, aunque, en este caso, se trata de la denominada pensión no contributiva. Para percibir esta paga mensual, el solicitante deberá igualmente reconocer unos requisitos que la Seguridad Social detalla en su portal.
Cómo calculo lo que me van a pagar de pensión
Como ya se ha mencionado, la cuantía de la pensión por jubilación vendrá determinada por la base reguladora, al que se le deberá aplicar el porcentaje general correspondiente a los años cotizados.
Siendo 15 años el periodo mínimo de cotización necesario para solicitar la pensión, la pensión que se genera alcanzado dicho mínimo es del 50%. A partir de entonces, se añade un 0,19% por cada mes adicional de cotización, o, lo que es lo mismo, se suma un 2,28% por cada año cotizado a partir del decimoquinto.
Actualmente, para poder cobrar el 100% de la pensión es necesario tener cotizados 36 años y dos meses. Un periodo que, sin embargo, ya se prevé que vaya en gradualmente en aumento hasta llegar a necesitar haber cotizado durante 37 años para percibir la pensión de manera íntegra.