Una serie de pensionistas españoles se encuentran de enhorabuena. El Gobierno comunicaba recientemente sus planes de mejorarles las pagas de jubilación. Dicha modificación está encuadrada dentro del plan de reformas presentado por el Ejecutivo a los sindicatos.
La principal novedad es el aumento de las prestaciones más bajas, que irán escalando a lo largo de los próximos tres años. El objetivo es que en 2027 se sitúen prácticamente a la misma altura que el Salario Mínimo Interprofesional. Eso implicaría que aquellos que menos ganan en la actualidad llegarían hasta casi los 1.200 euros.
Los representantes de los trabajadores consideran que este grupo de pensionistas precisan de un tratamiento diferente. De ahí que reclamen para ellos unas condiciones más favorables para que no pierdan poder adquisitivo. Los empresarios han mostrado en todo momento su oposición a dicha medida.
La brecha existente entre las pensiones más bajas y las más elevadas cada vez es más amplia. Sobre todo si tenemos en cuenta que los que más ganan ya superan los 3.000 euros, mientras que las mínimas rondan los 850.
En cualquier caso, las pensiones, tanto de jubilación, viudedad, orfandad y a favor de familiares, se han revalorizado este año. Las contributivas elevaron la mejora un 8,5%, mientras que las no contributivas lo realizaron un 15%. Está establecido que estas actualizaciones se ajusten al aumento anual de la inflación para que los beneficiarios no resten poder adquisitivo.
¿Cómo quedarían las pensiones mínimas en 2027?
El texto del Gobierno contempla el incremento de las pagas mínimas que demandaban los sindicatos. La propuesta presentada se asemeja bastante a lo que se llevó a cabo en su día con la subida del salario mínimo. Se fija una senda anual entre 2024 y 2027 que permitiría cumplir al término de este tercer año el objetivo propuesto de 1.200 euros.
El propósito es garantizar que lleguen al 60% de la renta mediana, recoge el portal La Información. Para ello tomarán como referencia la evolución de la pensión mínima con cónyuge a cargo.
También se trabaja en el alza de las pensiones no contributivas, que sufrirían unas actualizaciones muy similares. Aumentarían hasta converger en 2027 con el 75% del umbral de la pobreza estimado para un hogar unipersonal.
¿Cómo están las pensiones en 2023?
Las pensiones contributivas se han visto mejoradas desde comienzos de enero un 8,5%. Esta cifra corresponde a la inflación media registrada entre diciembre de 2021 y noviembre de 2022.
Por lo general, la cuantía de la misma queda condicionada al periodo de cotización a la Seguridad Social y de la situación familiar. La pensión mínima de jubilación para los mayores de 65 años con cónyuge queda establecida en los 966,20 euros al mes.
Se reduciría hasta los 783,10 si no tuviera cónyuge, mientras que los que cuenten con cónyuge, pero no a su cargo cobrarían 743,30 euros mensuales.
Por su parte, la pensión para menores de 65 años se eleva hasta los 905,90 euros. Sin cónyuge se reduciría a 732,60 euros, frente a los 692,50 euros de los que tengan cónyuge no a cargo.
En lo que se refiere a la prestación por viudedad, lo máximo que se alcanzan son los 905,90 euros al mes cuando haya cargas familiares. Cuando se cuente con más de 65 años y una discapacidad por debajo del 65% percibirían 783 euros.
Aquellos que se encuentren entre los 60 y 64 años ingresarían 732 euros. Por debajo de 60 años la ayuda sería de 593 euros. En cuanto a las pensiones mínimas por orfandad, los perceptores llegan a cobrar 239,50 euros. Alcanzaría los 470,90 euros de ser un menor de edad y con discapacidad igual o superior al 65%.