Parece que, en los últimos tiempos, ha aparecido una disputa entre la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) y la Dirección General de Tráfico (DGT). La razón no es más que una de sus conocidas etiquetas medioambientales.
Desde hace algún tiempo, Tráfico obliga a los vehículos a distinguirse según su nivel de contaminación a través de unas etiquetas que muestran los distintos valores de contaminación, estas van pegadas en el parabrisas de forma similar a las de la ITV.
Sin embargo, el problema ha aparecido debido a que parece que no todos los vehículos estarían bien etiquetados. Si quieres saber cuál ha sido la advertencia de la OCU, sigue leyendo y no te pierdas nada.
Esta es la advertencia de la OCU sobre las etiquetas de la DGT
La OCU ha llevado a cabo un estudio sobre las distintas emisiones de los vehículos. Gracias a ello, ha advertido a la DGT que, en contra de lo que se pueda pensar, los vehículos híbridos también contaminan.
Esto hace que el que lleven la etiqueta Cero propuesta por el organismo de tráfico no sea correcto. Aunque avalan el esfuerzo que ha llevado a cabo la DGT a la hora de catalogar los vehículos, no han dudado en advertirles sobre el error.
De hecho, uno de los problemas principales es que las etiquetas ya cuentan con varios años a sus espaldas, lo que ha hecho que en muchos casos queden desfasadas. Así ha sucedido para los vehículos híbridos, por lo que la OCU pide que se haga una revisión de conceptos.
En concreto, la Organización de Consumidores y Usuarios pretende que se revisen a fondo las etiquetas Cero y la ECO. La razón es que estas están pensadas desde el primer momento para catalogar a los vehículos con menos emisiones y, por tanto, menos contaminantes.
Los coches híbridos también contaminan
Desde el organismo han realizado un último estudio donde han analizado las emisiones de 147 automóviles en total. Todos ellos, además, se han lanzado y comercializado en los últimos años.
De acuerdo con las conclusiones obtenidas durante la investigación, las emisiones contaminantes son demasiadas tanto en los híbridos enchufables como en aquellos que no lo son.
Además, también hay que tener en cuenta que la autonomía eléctrica de este tipo de vehículos alcanza los 40 o 50 km/h. Es decir, a partir de dicha velocidad, funcionan del mismo modo que cualquier otro vehículo con motor de combustión.
Otro dato a tener en cuenta sobre este tipo de coches
Una de las cosas que la OCU también ha tenido en consideración es que es muy complicado, por no decir imposible, saber el uso que los conductores le dan a sus vehículos.
En este sentido, no se puede conocer si quienes tienen un coche híbrido o un enchufable usan la autonomía eléctrica. Es decir, apenas se puede saber a ciencia cierta cuál es su nivel de contaminación.
Asimismo, otra apreciación de la OCU es que la equipación de esos vehículos hace que sean más pesados y también más grandes. Esto hace que se multiplique el gasto de combustible, lo que perjudica al nivel de contaminación.
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Por todo lo expuesto, la OCU considera que la DGT debe replantearse el uso de algunas etiquetas. En concreto, los híbridos no deberían llevar aquellas denominadas como Cero, ya que se podría caer en el engaño.
Como hemos podido ver, sin importar si son enchufables o no, no cumplen con la característica de cero emisiones. En este sentido, la DGT deberá hacer una revisión y volver a catalogar a este tipo de vehículos para cumplir con la normativa.