Si bien os contamos que clientes de Ikea y Decathlon estallaron contra estas multinacionales debido a su mala gestión ‘online’, parece que Ikea no solo ha enfadado a sus clientes por eso. Y es que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha denunciado a la compañía sueca tras identificar que cobra un suplemento de 9 euros sin informar previamente en las condiciones generales.
La OCU ha explicado, a través de un comunicado que ha denunciado a la empresa ante la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid. Y es que, este cargo se está aplicando a todos los clientes que están realizando compras en tiendas físicas de San Sebastián de los Reyes, Alcorcón, Goya y Serrano (Madrid), con compras inferiores a 100 euros.
Identificamos que Ikea cobra un suplemento de 9 € en la compra de su tienda física. Pedimos a Consumo que inspeccione la legalidad de este suplemento https://t.co/JsrsO9NpZ0
— OCU (@consumidores) June 2, 2020
Madrid está en la fase 1 de la desescalada, motivo por el que las tiendas de IKEA solo pueden abrir acotando la superficie a 400 metros cuadrados. A los clientes que acuden a los establecimientos físicos (con cita previa), y adquieren algún producto, se les cobra este suplemento de 9 euros por el servicio «planificación de la compra y realización de pedido» a aquellos clientes que hacen compras inferiores a la cantidad de 100 euros.
El problema viene cuando este importe se está cobrando sin haber informado antes al cliente, algo de lo que la compañía sueca debería informar en su página web. Las reiteradas quejas de los clientes han hecho que la OCU denuncie esta acción ante la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid «para que inspeccione la legalidad de este suplemento y si es el caso sancione a la empresa en caso de incumplimiento»
Enrique García, responsable de comunicación de la OCU, ha informado al medio ‘20minutos’,que «los consumidores se han quejado porque no conocían el coste adicional del servicio y, a nuestro juicio, Ikea no está informando de forma correcta al no incluirlo en las condiciones generales».
«Tal vez no lo hayamos hecho de la forma adecuada»
Por su parte, Ikea se ha defendido. Según un comunicado de la multinacional, al que el medio ‘20minutos’ ha podido acceder, Ikea afirma que «la información que ha publicado la OCU no responde completamente a la realidad».
Además, añade que «hemos informado del cobro de este importe tanto en web como en nuestras tiendas, aunque conscientes ahora de que tal vez no lo hayamos hecho de la forma adecuada, vamos a hacer un refuerzo de esta comunicación».
Y es que, por lo que intentan aclarar, este importe «se refiere a un suplemento por la recogida y preparación de artículos por parte de nuestros colaboradores en pedidos inferiores a 100 euros y que incluyan productos situados fuera del área de 400 metros cuadrados, habilitados para la compra directa». Y es que, según explica, esta «nueva mecánica de venta» supone más procesos para el personal que se encarga de preparar pedidos.