Hay bebidas que solo el simple hecho de nombrarlas nos traslada mentalmente al verano. Es oír su nombre y pensar en la época más calurosa del año. Y no es porque el resto del año no se pueda consumir, sino porque en la temporada estival es donde más acostumbrados estamos a él.
Estamos hablando del gazpacho, una de las bebidas del verano. Tanto por su sabor como su frescura, se convierte una opción muy refrescante y, a la vez saludable. Son muchos los que no pueden pasar sin él en verano y siempre lo tienen en su nevera para poder tomar cuando les apetezca.
Aunque se trata de una receta tradicional, hay quien no tiene tiempo o no quiere prepararlo en casa. Para ellos, podemos encontrar en el mercado una amplia variedad de gazpachos. Tanto las grandes marcas como las marcas blancas tienen este producto disponible en su catálogo.
Esto ofrece al cliente la posibilidad de poder decidir cuál es el que le gusta más una vez que haya ido probando. También es importante tener en cuenta los ingredientes. Este detalle que a veces pasamos por alto puede hacer que optar por uno u otro influya en la calidad de su elaboración.
La importancia de los ingredientes de un gazpacho
Para la elaboración del gazpacho se utilizan principalmente verduras. En este sentido, el tomate es uno de los principales protagonistas, a la vista está el color rojo que tiene esta bebida. Pero también podemos encontrar otros ingredientes como pepino, pimiento o ajo.
Todos ellos tienen en común que son alimentos ricos en vitaminas y minerales, haciendo que sea una opción muy saludable. Y es que se puede considerar al gazpacho una bebida que, a la vez que es nutritiva, también es baja en calorías. Por eso mismo, consumido en proporciones normales, nos aporta muchos beneficios.
Cuando lo hacemos en casa, podemos controlar perfectamente las proporciones de ingredientes que incluimos. El problema viene cuando optamos por comprar uno que ya está elaborado. Ahí debemos de echar un vistazo a la etiqueta para dar con la opción más saludable.
En algunos casos, la proporción de agua puede ser incluso superior a la cantidad de tomate que contiene. Esto hace que no tengamos un gazpacho de buena calidad.
También es importante revisar que el aceite de oliva sea virgen extra y que este sea, aproximadamente, un 8% de su composición. Aunque no lo hagamos nosotros, no quita para vigilar su calidad.
Las marcas blancas van ganando terreno
Hasta hace no tanto, estábamos acostumbrados a consumir gazpacho de marcas reconocidas. En cierto modo, esto hacía que creyéramos que iban a ser de mayor calidad. Y no es que nosotros le queramos restar calidad, pero sí que es verdad que las marcas blancas han ido ganando adeptos.
En este sentido, el nutricionista Pablo Ojeda ha apoyado en el programa de televisión 'Más Vale Tarde' la calidad de estas últimas. En su opinión, el gazpacho de marca blanca “tiene una calidad que nada tiene que envidiar con las de primeras marcas”. Por eso mismo, anima a los consumidores a que les den una oportunidad.
Continuó diciendo que no es algo que ocurra únicamente con el gazpacho. Y es que, explica que la evolución a nivel tecnológico de sabor y de cómo lo consiguen “ha evolucionado muchísimo en los últimos años”. Por eso, ya no tenemos que mirar las marcas blancas como si fueran de peor calidad.
Aun así, hace hincapié en la necesidad de ver la composición de cada producto que compremos. Sea marca blanca o primera marca, puede ser que la composición no sea todo lo natural que queremos. Por eso mismo, esto debe ser lo que nos haga decantarnos por uno u otro, no la marca.