La tarjeta de débito se ha convertido en el sistema de pago más utilizado por parte de un amplio sector de la población. Nos aportan mucha seguridad y comodidad en las compras. Pero hay un tema que desconocemos y que afecta al número concreto de tarjetas de débito que deberíamos tener en la cartera.
En la actualidad, según los datos facilitados por el Banco de España, en nuestro país hay emitidas unas 47,35 millones. Esto hace pensar que algunas personas disponen de más de una. Sobre todo porque la gente mayor y los más jóvenes carecen de ellas.
Resulta complicado cuantificar la cantidad ideal de tarjetas de débito. Como es lógico, en algunos casos pueden acarrearnos un gasto innecesario, pero al disponer de varias, también nos pueden sacar de algún apuro. En este sentido, los expertos del comparador financiero HelpMyCash concretan la cifra más conveniente.
En primer lugar aclaran que no hay un número exacto que se pueda catalogar de ideal. Ya que entran en escena una serie de factores como pueden ser las "necesidades y preferencias" de cada persona. Pero sí que estiman como adecuado, en general, disponer de como mínimo "dos tarjetas de débito".
Cuáles son las ventajas de tener más de una tarjeta
Disponer de más una cuenta con una serie de beneficios que también deberías contemplar. Permite diversificar las opciones de pago. Puede darse el caso de que una de ellas nos dé problemas o no las rechacen. De suceder esto, tendríamos una alternativa en el resto de tarjetas. Lo valoraremos mucho cuando nos ocurra algo parecido.
Un segundo aspecto a tener en cuenta son la gran ayuda que nos aportarán en los viajes. Sobre todo si realizas desplazamientos con cierta regularidad. Recomiendan hacerlo con dos o más tarjetas de débito, a poder ser que pertenezcan a distintas redes de pago.
Eso permitirá que puedan ser admitidas en distintas ubicaciones o cajeros sin necesidad de asumir comisiones. Cuantas más tengamos, más fácil resultará encontrar un sitio en el que retirar el efectivo.
En este sentido, ponen en valor el papel que pueden desempeñar ciertas propuestas de algunos bancos. Es el caso, por ejemplo, de N26, que resulta ideal para los desplazamientos al extranjero. Desde la app del móvil será posible controlar los movimientos que se hagan gracias a la recepción de notificaciones.
Se puede contratar en apenas diez minutos y en menos de una semana ya se tendrá disponible. Carece de comisiones por cambio de moneda y consiente tres retiradas gratis al mes.
Otra tarjeta que recomiendan es la de Revolut. Facilita la retirada al mes de hasta 200 euros sin comisiones. Una vez que se supere dicha cifra empezarán a cobrar un 2 %.
Las cargas irán vinculados a una tarjeta de crédito o de débito. Aunque también existe la posibilidad de realizarlo por medio de una transferencia, Google Pay o Apple Pay.
Al contar con más de una tarjeta nos resultará mucho más sencillo hacer la separación de gastos. Por ejemplo, una de ellas puede destinarse en exclusiva para gastos personales, mientras que otra iría para gastos comerciales. Todo ello contribuirá a llevar un mejor control de las finanzas domésticas.
Los riesgos que implica disponer de varias tarjetas de débito
Por lo general, contar con varias tarjetas de débito presenta más ventajas que inconvenientes. Pero también habría que valorar, en función de nuestra situación, si nos compensan o no. Explican que algunas de ellas suelen ir asociadas con tarifas o cargos anuales.
Si no le prestamos la suficiente atención, cabe la posibilidad de que se incrementen de forma inusual nuestros gastos bancarios. Si haces pocas compras y retiras poco dinero del cajero, posiblemente te compense más manejarte con una sola.