La reforma fiscal aprobada hace unos días por el Gobierno ha generado bastante revuelo. Entre otras cosas anunciaban un impuesto temporal para los patrimonios más elevados. Desde el Ministerio de Hacienda se veían obligados a tomar medidas ante la postura adoptada inicialmente por algunas comunidades autónomas.
La decisión del Ejecutivo también afectaba a las rentas de entre 18 000 y 21 000 euros, que verán reducido el IRPF. Estiman que esto beneficiará aproximadamente a la mitad de la población.
Se esperan meses complicados en España hasta finales de año
Ya han sido varios los economistas que se han pronunciado sobre el otoño que le espera a España. Gonzalo Bernardos auguraba que habría que seguir apretándose el cinturón, pero descartaba por completo cualquier tipo de crisis. Confiaba en que nuestro país superase los próximos meses sin demasiados apuros.
Niño Becerra, por su parte, se mostraba contrario al incremento de impuestos y proponía otras soluciones antes. El Banco Central Europeo también tenía claro que cualquier nueva medida debe ser temporal y específica.
Philip Lane señalaba que para evitar que los paquetes fiscales carguen sobre el déficit, los adinerados debían ejercer un papel esencial. Proponía una subida de tasas a los más ricos y a las compañías con más beneficios.
Entendía que de esta manera se ayudaba a los colectivos más vulnerables y castigados por la subida de los precios. Se prevé, además, que haya un aumento de los tipos de interés a finales de octubre. Ante la postura del BCE, Santiago Niño Becerra quiso lanzar una recomendación a través de su cuenta de Twitter.
Niño Becerra propone alternativas a las subidas de impuestos
El economista español considera que lo más adecuado es evitar la subida de impuestos para rebajar la inflación. En su opinión, existen otras alternativas que podrían dar un buen resultado sin necesidad de afectar al bolsillo de algunos contribuyentes.
En primer lugar apuesta por perseguir el fraude y la elusión fiscal. También propone la optimización del gasto público, además de crear un IVA que gravase los artículos de lujo.
En el caso de que esto no diera los resultados deseados, sí que llegaría el momento de elevar los impuestos. Sobre todo a aquellos ciudadanos que más rendimiento le han sacado a la crisis y menos lo acusan en sus cuentas.
Las medidas del BCE no dieron el resultado deseado
Desde que se pusieran en marcha las medidas para contener la inflación a nivel europeo, la situación no ha registrado grandes mejoras. El euro continúa devaluándose y la deuda soberana sigue incrementando su rentabilidad. Ante esto, el BCE ha tenido que plantearse encarecer el precio del dinero.
La presidente de esta entidad, Chirstine Lagarde, confesaba que en un principio todo debería ir a peor para que se mejorase. Es casi seguro que los tipos de interés sigan al alza, algo que también cree Niño Becerra. Todo apunta a que los tipos podrían alcanzar el 5,5% en el continente.
España se salvará de la crisis
Una visión más optimista que Niño Becerra la ofrecía hace unos días otro economista como Gonzalo Bernardos. Advierte que nuestro país sufrirá "una gran desaceleración y el crecimiento del PIB será exiguo". Sin embargo, se salvará del decrecimiento por la "escasa producción industrial y la buena temporada turística".
Pero habrá otros países europeos que sufrirán de lleno la crisis a lo largo de los próximos meses. Es el caso de Alemania, que ya no contará con "una materia prima muy barata", como es el gas natural. También verá reducida su capacidad exportadora por cuestiones políticas y económicas.
Considera que la industria germana, que es "su gran estandarte, lo pasará muy mal". Eso llevará al país a entrar "en una crisis estructural". En España, por su parte, solo sufrirá "una leve recesión".