Puede parecer una sanción un tanto extraña, pero la DGT ya la ha impuesto a algún conductor. Se trata de una multa por conducir lejos de su casa. Pero no sería la única irregularidad por la que podrían castigarte desde Tráfico.
Todo conductor que se pone al volante de un vehículo conoce sus limitaciones. Es posible que tras el examen psicotécnico que se realiza para obtener el carnet de conducir o para renovarlo detecten ciertas anomalías. De ser así, dichas incidencias quedarían recogidas en el permiso.
Y de no cumplir con las normativas impuestas puede acabar siendo multado por parte de los agentes de Tráfico. Pero conducir lejos de casa no sería la única sanción extraña o rara que contempla el órgano dirigido por Pere Navarro. También se incluye llevar pasajeros en el coche.
¿Cómo puedo saber mis limitaciones?
Si profundizamos un poco en esta cuestión, en el permiso de conducir, en la sección 12, se recogen las 'Observaciones'. En el caso de que nos detectaran algún tipo de problema ahí se recogerían todas las irregularidades existentes.
Todo dependerá de la información que hayan extraído del test psicotécnico, al que todos los conductores se deberán enfrentar. En dicho punto se recogen en formato código las distintas restricciones que se le atribuyen a cada persona. En el caso de vulnerar dichas normas se expondrían a una multa.
¿Cuáles son las multas más extrañas?
Aunque no sea lo más común, hay ciertas personas que quizás deberían revisar su carnet de conducir. Solo de esa manera se podrían evitar un disgusto la próxima vez que se monten en el coche. Y es cualquiera puede ser víctima de estas multas tan raras que impone la DGT.
En el código 62 de estas observaciones se recoge que el conductor no puede circular a cierta distancia de su domicilio habitual. Desconocemos los motivos por los que no podría hacerlo. Pero todo hace indicar que podría estar pensado para personas de edad avanzada o con alguna discapacidad.
Otra razón por la que podrían sancionarnos y que puede resultar sorprendente la encontramos en el código 63. En él se determina que el conductor no puede llevar pasajeros en el vehículo que conduce. En el caso de incumplir dichas leyes se expone a una multa de 200 euros.
Sanciones por conducir demasiado abrigado
Nos encontramos en una época del año en donde el abrigo no puede faltar en nuestro vestuario. Para protegernos de la bajada de temperaturas recurrimos a los guantes, gorros, bufandas y todo lo que haga falta. Sin embargo, en el momento de ponernos al volante, quizás deberían evitarse ciertas prendas.
A la hora de conducir hay que procurar llevar ropa cómoda, sobre todo si tenemos pensado realizar trayectos largos. En la medida de lo posible no deben limitarnos cuando vayamos a maniobrar, ni tampoco obstaculizar nuestra visión.
En el caso de que te decantes por abrigos o chaquetas muy gruesas, te costaría mucho más moverte, pudiendo convertirse eso en un riesgo. Hay que decir que la DGT no prohíbe este tipo de prendas. Sin embargo, sí que pueden asociarse con algunas infracciones contempladas en el Reglamento General de Circulación.
Si se acaba ocasionando un percance, la sanción ascendería a los 200 euros si el agente lo aprecia peligroso. El Real Decreto 1428/2003 así lo recoge. "El conductor de un vehículo está obligado a mantener su propia libertad de movimientos, el campo de visión y la atención permanente a la conducción".
Todo con el propósito de garantizar "su propia seguridad, la del resto de los ocupantes del vehículo y demás usuarios de la vía". De ahí que portar guantes, abrigo o unas botas de montaña pueden llegar a limitar nuestros movimientos. También pueden suponer un obstáculo a la hora de adquirir una posición adecuada al volante.