Para que nuestro cuerpo funcione en óptimas condiciones es necesario que le demos aquello que necesita. Vitaminas, minerales... y en definitiva, cualquier aporte nutricional que haga que nos encontremos sanos y con energía.
No obstante, a veces no es posible ofrecerle todo esto. Bien sea por nuestro ritmo de vida o por nuestra mala alimentación, lo que está claro es que puede poner en riesgo nuestra salud. Sin embargo, ante este hecho nuestro cuerpo también nos avisa, tiende a mandarnos algunas señales, especialmente si somos mujeres.
Los síntomas que no debes ignorar si eres mujer
Una de las cosas que más nos caracteriza a las mujeres, biológicamente hablando, es nuestro ciclo hormonal y menstrual. Su inicio se da cuando empieza la pubertad y cesa, en la mayoría de casos, con la llegada de la menopausia.
Aunque gracias a él nuestro cuerpo se mantiene en un equilibrio saludable y es capaz de lograr un embarazo, lo cierto es que a veces también se producen desajustes. Y cuando esto ocurre, tendemos a sufrir algunos problemas a nivel físico.
En este sentido, llevar a cabo una alimentación sana y equilibrada puede ser determinante, ya no solo para un correcto funcionamiento hormonal sino también neuronal. Recordemos que las hormonas funcionan gracias a las neuronas.
Pero si vamos más allá y analizamos lo que consumimos, nos daremos cuenta de que todos estos beneficios lo encontramos en los alimentos. Más concretamente, en las vitaminas que nos aportan, y entre todas las que existen, hoy destacamos la B12.
Aunque tener un buen aporte de vitaminas es algo indispensable para cualquier persona, en el caso de las mujeres un déficit en la vitamina B12 podría conllevar problemas de salud. En estos casos, el organismo tiende a perder gradualmente la capacidad de absorberla a medida que vamos creciendo.
Es por ello que sigue siendo importante consumir alimentos de los cuales podamos obtenerla. El pescado, la carne, los huevos, la leche y otros productos lácteos son, por ejemplo, alimentos ricos en vitamina B12.
No obstante, en algunas mujeres un déficit de esta vitamina también podría estar relacionado con algún problema menstrual. En muchos casos, la irregularidad de los ciclos o el dolor de los mismos podrían guardar una estrecha relación.
Ahora bien, su carencia también podría repercutir en otras esferas de la vida, como el momento del parte o la lactancia. Pero nuestro cuerpo es sabio, y si algo sabe es que ante la más mínima sospecha debería ponernos en aviso.
Y eso es precisamente lo que hace, mandarnos una especie de señal a través de síntomas. Si eres mujer, lo que te vamos a contar a continuación te puede interesar. Si bien estos síntomas pueden aparecer en cualquier momento, sería más habitual si lo hicieran si tienes entre 40 y 60 años.
En estos casos, deberías prestar atención a las pérdidas de memoria y a la fatiga recurrente. Así mismo, tener anemia, palidez extrema, mareos y hormigueos podrían suponer una señal de bajo oxígeno en sangre. Algo que suele ocurrir cuando nos falta vitamina B12.
La importancia de mantener unos niveles adecuados
Si empiezas a notar los síntomas que acabamos de mencionar, te aconsejamos que acudas al médico y te realices un análisis de sangre. Presentar un déficit de vitamina B12 podría ser perjudicial para tu salud, especialmente si estos síntomas van acompañados de otros.
Por ejemplo, en algunos casos también podrías observar diarrea, estreñimiento, falta de apetito, irritabilidad, problemas de concentración e incluso inflamación de encías. El estado anímico también podría verse afectado, ya que los niveles de serotonina se verían reducidos.
Para que esto no ocurra, puedes optar por recurrir a los suplementos vitamínicos (siempre bajo la supervisión del médico). Ten presente que unos niveles adecuados de vitamina B12 te ayudan a mantener la masa muscular y la resistencia, además de mejorar la concentración y las habilidades cognitivas.