El Ministerio de Hacienda sacará a la venta un lote de monedas. En realidad se tratará de una subasta en donde se desprenderán de un importante número de piezas. Serán todas aquellas antiguas pesetas que han ido recaudando entre 2021 y 2022 a través del Banco de España.
Pero los futuros compradores no se harán con ellas en forma de monedas, sino de chatarra. La Fábrica Nacional de Moneda y Timbre adjudicará al mejor postor la importante cantidad de 360.180 kilos, publica El Periódico de España.
Tal y como aparece recogido en el portal de contratación del Estado, este proceso de venta se efectuará de manera online. Los interesados deberán enviar sus propuestas telemáticamente y la opción más elevada será la seleccionada. No habrá la posibilidad de pujar, ya que se realizará el trámite a través de un sistema de sobre cerrado.
La cantidad que sacan a la venta puede resultar a simple vista muy importante. Pero comparado con la "gran desmonetización" que implicó la irrupción del euro en 2022 supone una "minucia", explican. En aquella época se trataron 6.603 millones de monedas, con un peso que superaba las 30.400 toneladas.
Este tipo de operaciones no se efectúan de manera periódica. El Banco de España se ocupa de la recogida de las pesetas, y cuando se llega a unos volúmenes importantes es cuando se destruyen y se saca a subasta el metal.
Los interesados tendrán que rascarse el bolsillo
Las personas que tengan interés en hacerse con este material resultante deberán realizar un importante desembolso. El valor que le dan en la Casa de la Moneda a este contrato es de más de 21 millones de euros. Pero para facilitar su venta han optado por dividir la chatarra en nueve subastas.
Los tres primeros lotes, como indica dicha web, se elevan hasta las nueve toneladas cada uno. El paquete de mayores dimensiones alcanza las 134 toneladas y es de lunifal, una aleación de hierro, níquel, cobre, manganeso y aluminio. También existe la posibilidad de adquirir un pack de 74 toneladas de oro nórdico, que es una aleación de aluminio, zinc, cobre y estaño.
Además, en las subastas se incluirán una importante cantidad de kilos de acero recubierto, cupro-níquel y aluminio. Todo ello procede de las pesetas destruidas y convertidas en chatarra.
¿Cómo se puede aprovechar todo ese material destruido?
El metal resultante de esta destrucción podrá ser reutilizado en distintos sectores. Indican que se podrían fabricar barriles de cerveza con el aluminio de las monedas de peseta. El bronce con aluminio de las piezas de 50 y 100 pesetas se usa para la construcción de hélices en barcos.
Por su parte, el cupro-níquel permitirá hacer nuevas monedas o darle uso en la industria automovilística. Añaden, también, que el aluminio con magnesio es válido para el sector alimentario y de la construcción.
El adjudicatario de estos lotes tendrá la obligación de recoger el material en la Comunidad de Madrid. Señalan que no habrá derecho a retrasos en su recogida, ya que después de 30 días, por cada día de demora impondrán una penalización. En las condiciones del contrato también exigen que se cuente con un camión con unas determinadas características para hacer la recogida.
Debe ser "tipo tráiler, con carga trasera, altura de la caja entre 1 y 1,20 metros. Sin plataforma de carga elevadora trasera o bien escamoteable bajo el camión". Todo ello sin que sea posible rebasar las 24 toneladas en cada viaje.
Este tipo de lotes no están al alcance de cualquiera. Las empresas deberán acreditar que cuentan con un volumen de negocio superior al medio millón de euros anual. Por su parte, los autónomos tendrán que presentar sus cuentas anuales para demostrarlo.