Las monedas son unas de las piezas más buscadas por los coleccionistas. Sin embargo, también existen otro tipo de ejemplares que se coleccionan y que pueden llegar a tener un gran valor. Hablamos de los billetes.
Los aficionados al mundo del coleccionismo de monedas también buscan billetes con las mismas características. Si a la primera se la conoce como numismática, esta actividad se conoce como notafilia. A través de ella, los interesados buscan coleccionar, así como sacar dinero, a través de billetes escasos, antiguos o raros.
¿Qué buscan los coleccionistas de billetes?
La notafilia es una rama que parte de la numismática. Por ello, una de las características principales que deben tener los billetes para coleccionarlos es estar en buen estado de conservación. Pero no es el único factor que hay que tener en cuenta.
1. Estado de conservación
Al igual que sucede con las monedas, uno de los factores más importantes cuando se valora un billete es su estado de conservación. Para hacerlo, los expertos analizan que no tengan dobleces, así como estriaciones, rasgaduras o cualquier señal de deterioro. En este sentido, cabe destacar que los billetes que suelen tener más valor son aquellos que no han entrado en circulación.
2. Antigüedad
Otro aspecto interesante a valorar es la antigüedad de los ejemplares. Los billetes clásicos o antiguos son los más valiosos, así como los más buscados, debido a su alto valor histórico. Es lo que sucede, por ejemplo, con aquellos ejemplares que tienen motivos alegóricos o personajes históricos españoles como parte de su diseño.
3. Ejemplares especiales
Por otro lado, también se valora que la pieza pertenezca a alguna serie especial, hablando en términos históricos. También son muy valorados los que tienen errores, variaciones especiales y otros aspectos similares.
Estos son los billetes de pesetas que más destacan
En este sentido, dentro de las series de billetes antiguos, hay algunas que destacan entre las demás. Esto se debe a su período histórico, así como por las características de su emisión. Existen dos billetes de pesetas que llaman la atención por estas características.
Billete de 25 pesetas de 1906
El primer billete a tener en cuenta es el de 25 pesetas de 1906. Se trata de una pieza con una particularidad. Para su impresión, se encargó la casa de Bradbury and Wilkinson, en Londres.
En su anverso se puede ver una figura femenina sentada, un grabado muy característico de los ingleses. Por su parte, en el reverso, se puede ver en el billete el escudo de España.
En este aspecto, como afirman desde Felix Cuquerella, firma experta en billetes españoles, el billete está valorado en 759 euros cuando está en excelente estado de conservación.
Billete de 1.000 pesetas de 1938
Otro de los billetes más interesantes que se pueden encontrar es el de 1.000 pesetas del 20 de mayo de 1938. Se trata de una serie que pertenece a la Guerra Civil Española y es muy valorado, pues después se impusieron nuevas series de billetes, así como de monedas.
Este cambio invalidó los ejemplares emitidos por la II República, y obligó a sellar muchas piezas para que fueran válidas hasta que entraron en vigor los billetes del régimen franquista. Esto es lo que sucede con esta pieza, de cuya impresión se encargó la casa de Leipzig y Berlín.
En este caso, como afirman los expertos de Numismática Córdoba, el valor e este billete podría situarse en unos 400 euros cuando se encuentra en buen estado de conservación, al igual que sucede con el ejemplar anterior.