H&M tiene el vestido veraniego que mejor sienta y cuesta solo 10 euros. El verano es el sonido de las olas del mar, de una tarde de mojitos en el balcón o una noche de terraceo y fiesta con amigos. Sin embargo, mucho antes de que esta estación hiciera su entrada oficial, las altas temperaturas obligaron a las ‘insiders, ‘influencers’, actrices y modelos a sacar una pieza clave que arrasó en la década de los noventa: El mini vestido.
El micro vestido o mini vestido
La tendencia que las modelos nos enseñaron a llevar y a amar se apoderó de marcas de la industria rápida de la moda como Zara, Pull&Bear, Stradivarius o H&m.
Esta última firma ha querido contribuir a que el mini vestido no sea solo una prenda de supermodelos y para ello ha creado uno nuevo de manga corta y abullonada que podemos encontrar en su página web.
Concretamente, el micro vestido de la firma sueca posee un escote cuadrado y un cuerpo fruncido, tejido elástico y fluido de algodón y una falda ligeramente acampanada con el vuelo justo y necesario para complacer a todos los estilos.
Esta prenda está disponible en color lila, pero también con estampado de flores en tonos rosas y rojos sobre una base crema. El punto a favor de estos dos looks es que son muy baratos, específicamente valen 9,99 euros cada uno.
El precio es un rasgo que le hace diferenciarse de las otras marcas y que una vez más, muestra la intención de inundar el 'street style' y poner al alcance de todo el mundo ésta fabulosa y clave pieza de los noventa.
La prenda estrella de Kate Moss y Kaia Gerber
Kate Moss fue una de las modelos que, aunque no inventó el micro vestido, si consiguió que la prenda se convirtiera en una pieza de culto, ya que dinamitó el estilo luciéndolo durante los años 90 con zapatos planos o un tacón casi imperceptible.
De la Kate Moss que revolucionó la industria de la moda a la supermodelo actual más conocida, es decir, Kaia Gerber de la que no se conoce ningún fracaso no hay mucha diferencia, si tenemos en cuenta que ambas modelos han revolucionado el mundo gobernado por estilismos y han convertido el mini vestido en su particular uniforme.
De hecho, esta prenda ha calado tanto en nuestra sociedad que ahora la moda se ha empeñado en hacerlo popular de la mano de cortes más amplios y tirantes más anchos, así como de firmas de alta costura que aportaron un toque ‘undergorund’ a este tipo de vestidos como, por ejemplo, Realisation, Par o Reformation.
Estas marcas han intentado llevar a cabo lo que la industria pretendía con el micro vestido, es decir, que este arrasara en el 'street style' y se apartara del metro ochenta y las piernas kilométricas que en un primer momento popularizó Moss.