El mercado laboral está en constante cambio y desarrollo y eso se refleja en la forma en que las personas solicitan empleos. Además de que gran parte del proceso de búsqueda de empleo se realiza en línea, muchas empresas se fijan cada vez más en las habilidades de los candidatos. En algunos casos, por encima incluso de su experiencia y formación.
Si quieres hacer un CV que marque la diferencia, además de trabajar las secciones clásicas de tu currículum, tendrás que prestar especial atención a la hora de plasmar tus habilidades.
Si no sabes cómo escoger tus habilidades o cómo saber que capacidades son más relevantes para el empleo que estás solicitando, echa un vistazo a este artículo. ¡Vamos a resolver todas tus dudas!
Cómo elegir las habilidades que pondrás en tu currículum
Las nuevas plantillas de CV suelen contar siempre con una sección de habilidades. El motivo es fácil de entender: este apartado está compuesto por una serie de palabras o frases cortas, que atraen la atención del gerente de contratación y permiten elaborar un primer perfil profesional del candidato.
Por tanto, tu reto es aprovechar este momento de atención para valorar tus puntos fuertes y marcar la diferencia frente al resto de candidatos. Pero, ¿cómo sabes cuáles de tus habilidades profesionales vale la pena destacar en tu CV? El consejo es utilizar las siguientes técnicas:
1. Consulta las habilidades deseables en la descripción de la oferta de empleo
Es común encontrar ofertas de empleo que dicen qué habilidades debes tener para ocupar el puesto que se ofrece. Sin embargo, es recomendable investigar un poco más para diferenciarte de otras personas que también pueden tener (o dicen tener) los requisitos básicos para el puesto.
Echa un vistazo al sitio web o las redes sociales de la empresa de contratación para comprender mejor las funciones de tu puesto e identificar palabras clave para optimizar tu sección de habilidades. De este modo, podrás ver cuáles de las capacidades que posees se adaptan mejor a los requisitos y necesidades de la vacante disponible e incluirlas en tu CV.
2. Descubre cuáles son tus principales habilidades profesionales
No solo deberás saber qué habilidades son importantes para desempeñar bien tu papel en el tipo de trabajo que quieres conseguir. También deberás tener una visión general de tus habilidades profesionales para elegir cuáles poner en tu currículum y, sobre todo, cuáles descartar. En caso de duda, prueba a hacerte alguna de las siguientes preguntas:
¿Qué conocimientos suelo aplicar para realizar mis tareas de manera eficiente?
¿Qué actitudes o aspectos de mi forma de ser me ayudan más en el ambiente laboral?
¿En qué tipo de proyectos destaco más? ¿Qué habilidades y talentos me ayudan a marcar la diferencia?
También puedes consultar a antiguos compañeros y superiores o incluso pedir algunos consejos a profesionales con experiencia en el área en la que pretendes trabajar.
3. Compara y combina la información
Haz una lista separando tus habilidades duras (habilidades que se pueden aprender) y tus habilidades blandas (características y capacidades relacionadas con tu forma de ser).
Una vez identificadas, compáralas con las habilidades que has encontrado en los requisitos de la oferta de empleo y que son deseables para desempeñar el tipo de posición que quieres conseguir.
Con toda esta información, podrás seleccionar una lista de tus habilidades blandas y duras que mejor se adapten al puesto ofertado e incluirlas en tu CV.
Ejemplos de habilidades blandas y duras
Los siguientes ejemplos de habilidades son aplicables a profesionales de diferentes sectores. Tal y como te hemos contado en este artículo, escoge únicamente aquellas que sean relevantes para ti y para el puesto al que quieres optar.
Ejemplos de habilidades blandas
El autoaprendizaje es una de las habilidades blandas más valoradas por la autonomía a la hora de aprender lo que se necesita para desempeñar tus responsabilidades profesionales.
La adaptabilidad, la resiliencia y la flexibilidad, cobran cada vez más importancia en la actualidad debido a la necesidad de integrarse a los nuevos modelos de trabajo, como el teletrabajo.
La creatividad, el liderazgo y la inteligencia emocional son otras de las habilidades blandas que siempre están al alza en el mercado laboral.
Ejemplos de habilidades duras
Las habilidades relacionadas con UX (experiencia de usuario), ya sea en diseño, programación, marketing o servicio de ventas.
El análisis empresarial, que también se relaciona con habilidades blandas como el pensamiento crítico o razonamiento lógico, demostrando la capacidad de evaluar profesionalmente diferentes escenarios, proponer estrategias y resolver problemas.
Habilidades duras relacionadas con la inteligencia artificial, la computación en la nube y las Tecnologías de la Información (TI).
Recuerda que además de elegir tus habilidades profesionales para ponerlas en su currículum, es importante demostrar que realmente tienes esas capacidades y esos conocimientos.
No olvides tampoco poner ejemplos de tus habilidades en otras secciones de tu currículum, como el perfil profesional, la experiencia laboral o la formación académica.