No es fácil definir cuál es la mejor dieta, debido a que cada persona tiene preferencias completamente diferentes. No comerá lo mismo un deportista que una persona mayor.
Aun así, cuando hacemos referencia a dietas de perdida de peso, debemos alejarnos de esas dietas milagros. Prometen mucho, pero no son tan buenas como parecen. Además, tienen mucho efecto rebote: pierdes y recuperas muy rápido.
Los expertos siempre le han dado importancia a dietas equilibradas, argumentando que son las más efectivas a lo largo de los años. Más que pasar hambre y comer poco es más importante centrarnos en reeducar la alimentación.
Harvard da las claves de una dieta perfecta
Un estudio reciente de los Investigadores de Harvard ha dado unas claves para poder tener una buena alimentación. Una dieta que vale para todo el mundo y no te prohíbe comer nada.
Antes de nada, los expertos destacan que es mucho más importante centrarse en la calidad de los alimentos más que en sus calorías. Saber qué porción o tamaño es ideal según el alimento y dejar de contar calorías o dejar de consumir alimentos.
Siempre hay que tener en mente que nuestro cuerpo es muy importante y debemos cuidarlo y mantenerlo saludable a lo largo de los años.
El Plato que te recomiendan los expertos
Como veníamos diciendo, los expertos han dado con la clave para consumir el plato ideal y saludable.
1. Frutas y verduras como pieza central: El 50% de un plato saludable debe componerse de alimentos vegetales, sin tener en cuenta tubérculos (las patatas). La gran mayoría de frutas y verduras son bajas en calorías y ricas en fibra, hecho que previene los picos de glucemia.
2. Cereales Integrales: El 25% (1/4) del plato debería estar formado por cereales integrales o granos enteros. No obstante, cabe destacar que siempre deben ser cereales no refinados, para tener mejor control de azúcar en sangre.
Los cereales más recomendables son el arroz integral o pan con harina integral.
3. Proteínas de calidad: representarían el 25% restante del plato y se aconseja escoger opciones saludables. Como, por ejemplo, el pescado, la carne de ave de corral o legumbres. Siempre se recomienda reducir el consumo de carne roja a una vez por semana y evitar carnes procesadas como salchichas.
4. Grasas saludables: siempre hay un mínimo de grasas que debemos consumir, como esas que viene de aceites vegetales, frutos secos o aguacates. Eso sí, siempre con mucha moderación. Se aconseja reducir al mínimo el consumo de grasas saturadas y grasas trans.
5. Bebidas: el consumo de agua siempre debe ser el principal para mantener una buena hidratación. Otra opción saludable son los cafés o los tés, siempre sin edulcorantes ni azúcares. Es evidente que debemos evitar el consumo de bebidas azucaradas o edulcoradas como los refrescos.
6. Lácteos: también son importantes y se recomienda el consumo de 1 o 2 lácteos por día. Siempre priorizar los lácteos bajos en grasas, como los desnatados.
Para finalizar, Harvard recomienda mantener un buen nivel de actividad física. No estrictamente se habla de hacer deporte, pero si de priorizar el ir andando a los sitios, subir las escaleras en lugar de coger el ascensor y dormir las 8 horas.
El principal problema de todas las dietas, los carbohidratos
Es el nutriente más criticado y más prohibido en las dietas. De todas formas, hay que saber identificar los diferentes tipos de carbohidratos y los momentos clave para consumirlos. Tanto los cereales, frutas y verduras son carbohidratos, pero distan mucho de ser lo mismo.
Todos estos alimentos no aportan lo mismo: ni la misma densidad calórica ni nutricional. Es más, los investigadores sugieren que uno de los principales problemas de obesidad a nivel mundial se debe al exceso de consumo de carbohidratos. Especialmente los ultraprocesados y esos que son de digestión rápida y alto índice glucémico.