Aunque en los últimos años este término se ha puesto muy de moda, lo cierto es que existe desde siempre. El síndrome del trabajador quemado afecta cada vez a más personas, lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿En qué consiste y qué podemos hacer para recuperarnos?
Se trata de un síndrome que también es conocido con el nombre de burnout. Es un estado emocional, mental y físico de agotamiento extenuante causado por un estrés prolongado y excesivo en el trabajo. Se caracteriza por sentirse emocional y físicamente exhausto, despersonalización y una disminución de la realización personal.
¿Qué es el síndrome del trabajador quemado?
El síndrome del trabajador quemado es un término que se refiere a un estado de agotamiento emocional, despersonalización y una disminución de la realización personal, causado por un estrés prolongado y excesivo en el trabajo.
Es una forma de estrés laboral crónico que puede tener graves consecuencias para la salud mental y física de una persona, incluyendo insomnio, depresión, ansiedad, y enfermedades relacionadas con el estrés.
¿Cuáles son las causas del síndrome del trabajador quemado?
Se han identificado factores de riesgo que pueden originar la aparición del síndrome del trabajador quemado, como estar sobrecargado de trabajo, ser presionado para trabajar más rápido, carecer de control sobre el propio trabajo o ser mal recompensado o reconocido.
También puede influir que nos impongan objetivos poco claros tener medios o recursos insuficientes que están fuera de sintonía con los objetivos requeridos, enfrentarse a un conflicto de valores o lo más común: sufrir precariedad laboral. El burnout afecta principalmente a personas muy comprometidas con su trabajo: lo decisivo para ellas es la profesión que han elegido y el sentido que le dan a lo que hacen.
En cambio, las personas propensas a la inestabilidad emocional (tendencia a percibir, construir y vivir la realidad y los acontecimientos como amenazantes, dolorosos y problemáticos) o escrupulosas (ser metódicos, organizados, pulcros, meticulosos, perseverantes, etc.) estarían más expuestas.
¿Cómo podemos recuperarnos?
Es esencial identificar que sufrimos el síndrome del trabajador quemado. Posteriormente, es conveniente modificar las condiciones y hábitos laborales que estén influyendo en su aparición.
Eso sí, en aquellos casos en los que el síndrome haya surgido y mantenido durante bastante tiempo, podría ser conveniente una reubicación en la plantilla, además de recibir apoyo psicológico o terapia por parte de un especialista.
De hecho, ir al médico es un plazo clave y necesario para encontrar el camino hacia la recuperación cuando aparecen los síntomas del síndrome del trabajador quemado. Incluso es posible que el especialista nos recomiende un paro en el trabajo de dos a tres meses.
Otros consejos útiles a tener en cuenta
También existen otros consejos que podemos seguir y que nos ayudarán a la hora de reducir los síntomas y tratar de superar este síndrome. Es evidente que tomarse un descanso es lo más importante, lo que nos ayudará a la hora de recargar energías.
Es aconsejable practicar actividades relajantes, como la meditación y el yoga. Y la práctica de deporte es fundamental, ya que nos ayudará a relajarnos y mejorará nuestro estado de ánimo. Dormir bien es otra forma de asegurarnos de descansar y recuperar las energías. Básicamente es importante tener una rutina de sueño saludable.
Por otro lado, aprender técnicas de gestión del estrés ayudará a identificar y gestionar aquellas fuentes que nos estén causando ansiedad, angustia y tensión en el lugar de trabajo. Y no debemos olvidarnos de lo más importante: si los síntomas persisten, considerar la posibilidad de buscar ayuda de un profesional de la salud mental.