Antes de la crisis del coronavirus, era muy extraño ver a ciudadanos con mascarilla por las calles de cualquier ciudad española. Pero, muy a nuestro pesar, ahora la mascarilla se ha convertido en un elemento imprescindible en nuestras vidas.
Asimismo, este elemento ha llegado a convertirse en un complemento de moda. Esto no quiere decir que la mayoría de la población no confirme que es incómoda, sobre todo en estos momentos que se acercan meses muy calurosos.
Teniendo en cuenta todos estos inconvenientes, y como era de esperar, muchas empresas, tanto nacionales como internacionales, no han perdido la oportunidad de sacar beneficio económico de la situación.
Esto ha derivado en la creación de multitud de mascarillas. Desde inventos como una mascarilla reutilizable que se desinfecta con el cargador del móvil, pasando por mascarillas mecánicas para poder comer e incluso mascarillas que traducen idiomas.
Una mascarilla transparente que dura un mes y con autodesinfectante
Uno de los últimos inventos, viene dado por la empresa norteamericana Leaf Healthcare. Según afirma la compañía, es la primera mascarilla totalmente transparente del mundo que protege del polvo, la contaminación y los microbios. Además, puede durar hasta un mes y tiene una función autodesinfectante.
Para la autodesinfección integra un filtro HEPA de la serie U que filtra el 99,9997 % de las partículas. También cuenta con un filtro de carbón activo que sirve para eliminar los malos olores y otras sustancias orgánicas del aire.
Del mismo modo, Leaf dispone de una tecnología de esterilización activa de los filtros que emplea luces UV-C de alta potencia para destruir los patógenos a nivel del ADN. Para activar dicha desinfección basta con pulsar un botón de la mascarilla, aunque es un proceso que ya se realiza automáticamente cada 30 segundos.
La mascarilla está diseñada con materiales 100% reciclables. En cuanto a su precio, la estándar puede adquirirse por 43 euros, mientras que el modelo con desinfección UV asciende hasta los 79 euros. Una inversión que parece razonable teniendo en cuenta que vamos a estar conviviendo con este virus durante una larga temporada.