El Banco de España ha vuelto a hacer temblar a miles de españoles. Y todo después de poner sobre la mesa un escenario para el año que viene a nivel económico que se ensombrece.
A pesar de la ligera mejoría del mes de junio, tres meses después han publicado unas proyecciones nuevas. Unas que no tienen nada que ver con lo que se preveía y en la que deja a las claras que habrá menos crecimiento y más inflación el año que viene.
En 2024, parece ser que el organismo español rebaja del 2,2% al 1,8% ese crecimiento previsto para el año próximo. Y por si fuera poco, sube el 3,6% que había estimado hasta el 4,3% de inflación media prevista para el año que viene.
Frenazo tras las previsiones del Banco de España a nivel económico para 2024
Un nuevo informe trimestral en el que se ha puesto de manifiesto que el empeoramiento de sus previsiones tienen que ver con el encarecimiento del petróleo.
Asimismo, tiene que ver con la probable retirada a final de año de las medidas de ayuda para paliar la inflación. Hablamos de la rebaja del IVA de productos energéticos, alimentos y la bonificación del transporte público.
Además, estas dos proyecciones con las que ha salido este martes el Banco de España también ponen el foco en los tipos de interés. Van a seguir elevados bastante más tiempo del que se podría pensar antes del verano.
Por si fuera poco, tras el elevado crecimiento de la actividad turística del año pasado y el presente, se avecina una estabilidad de las tasas de avance.
La tasa de crecimiento, revisada a la baja para 2024 y 2025
Con estos datos, el Banco de España espera que el PIB se eleve a tasas del 2,3%, 1,8% y un 2,0% para los años 2023, 2024 y 2025. En cuanto a la tasa de crecimiento, se prevé que sea del 2,3% en este año. Si bien se revisan a la baja las de 2024 y 2025 con 0,4 y 0,1 puntos, respectivamente.
Sobre el crecimiento económico, en este tercer trimestre solo avanzará el 0,3% y, sin duda, las previsiones se empeoran por "los nuevos supuestos sobre los que descansan las proyecciones. Implican un encarecimiento de la energía, un deterioro del contexto exterior y un mayor tensionamiento financiero".
El precio del barril de petróleo se situará en torno a los 83,5 € los dos próximos años, 11 euros más caro de lo que se había previsto en junio. Así las cosas, se espera que la economía española se comporte mejor que las previsiones que expone el Banco Central Europeo.
Para 2024, la revisión al alza de la inflación responde al encarecimiento de la energía y la supresión desde enero de la rebaja del IVA.
En cuanto a los alimentos, se prevé un perfil descendente en los próximos tiempos. Aunque dependiendo de las condiciones meteorológicas y el veto ruso a la exportación de cereales por el Mar Negro, la intranquilidad es latente.
Desaceleración del empleo en España en el tercer trimestre
En cuanto a la tasa de paro, se prevé una bajada de la creación de empleo en el tercer trimestre. Eso sí, el Banco de España rebaja en dos décimas dicha tasa prevista para este año, el 12% de la población activa. Y continúa con la idea de mantenerla en el 11,5% y el 11,3% en 2024 y 2025.
En cuanto a los salarios, el organismo no aprecia un gran riesgo de efectos de segunda ronda sobre los precios. Lo que se había pactado de una subida del 3,4% se mantiene. Si bien los convenios de nueva firma recogen un incremento del 4,3%.
Por último, sobre el déficit de las administraciones públicas previsto para este año, llega hasta el 3,7% del PIB. Y para 2024 sigue con una previsión del déficit del 3,4%. Eso sí, ya para 2025 se empeoraría ese porcentaje en una décima hasta llegar al 4,1%.
Así, las previsiones hacen que el déficit español se sitúe por encima del límite del 3% del PIB marcado por el pacto de estabilidad y crecimiento de la UE. Y sobre la deuda pública, esta quedará por debajo del 110% del PIB.