Los pañuelos están de moda. En el cuello o en el pelo pueden ser un buen aliado para resaltar tu estilo este verano.
Sencillos y elegantes. Así son los pañuelos. Un complemento la mar de versátil para completar tu 'look' diario. Y es que sus numerosas posibilidades lo convierten en un accesorio fundamental en tu armario.
La pieza esencial para reforzar tu 'look' diario
Si tu intención es conseguir un toque más casual, puedes hacerte una coleta normal anudando solo las puntas de tu cabello. Después, con un pañuelo finito y alargado bien doblado, rodea el pañuelo con tu propio pelo hasta llegar a la nuca. Concluye este look anudando los extremos en la parte superior de la cabeza o si lo prefieres a la altura del flequillo.
Si te gusta lo clásico, lo mejor es colocar la zona de en medio del pañuelo sobre la frente y atar los extremos sobre la nuca.
El pañuelo a lo ‘Thelma y Louise’ en descapotable puede ser otra opción, pero quizá es mejor reservarla sólo para eso. Cubre tu cabeza con un pañuelo y anúdalo bajo el cuello para evitar enredones durante el paseo en coche.
El look romántico queda genial. Hazte una trenza y adórnala entrelazando un pañuelo o cinta como si fuera uno de tus mechones.
Si quieres algo más socorrido puedes optar por el efecto diadema. Coloca los extremos en la parte superior de tu cabeza y anúdalos. Si prefieres esconder el nudo, sólo tienes que girar la diadema para que quede escondido en la zona de la nuca.
Las coletas altas o bajas con un pañuelo usado como coletero son fáciles y quedan de lo más sugerentes.
Pero este accesorio no puede usarse sólo en el cabello, también puede solucionarte el look colocándolo en el cuello.
Una opción rápida y sencilla es colocar el pañuelo sobre la parte trasera de tu cuello y dejar que los extremos caigan plisados y con naturalidad sobre la zona del pecho.
Para darle un toque casual puedes utilizar un foulard más largo y repetir la opción anterior de rodear el cuello con la tela un par de veces. Después pasa el extremo de un lado por debajo de la última vuelta. Anuda los dos extremos y vuelve a ahuecar la parte frontal.
Si el pañuelo es de tela gruesa, prueba a darle una vuelta al cuello y de uno de los extremos saca parte de la tela y pasa el otro por dentro.
Con cualquiera de estas opciones convertirás un look aburrido en el centro de todas las miradas. Y es que este accesorio atemporal es una pieza indispensable para cualquier amante de la moda.