Una Junta Arbitral de Transporte es un órgano administrativo que se encarga de determinar los términos de los contratos de transporte y las disputas relacionadas con ellos. Estas juntas están compuestas por un grupo de miembros experimentados y calificados.
En concreto, pueden incluir abogados, contadores, economistas, ingenieros, transportistas y otros profesionales con experiencia en el sector de transporte. Se han convertido en una herramienta muy importante para los participantes en el mercado de transporte, ya que ayudan a evitar el costoso y prolongado proceso de litigio.
Leyes que rigen la Junta Arbitral de Transporte
Estas son las leyes por las que se rige la Junta Arbitral de Transporte:
1. Ley 16/1987, de 30 de julio, de ordenación de los Transportes Terrestres
Esta Ley regula los transportes terrestres en España. El artículo 37 establece que los transportes terrestres de mercancías y personas deberán ser realizados por empresarios autorizados por el Estado.
El artículo 38, en cambio, establece que los usuarios del transporte terrestre deben cumplir con sus obligaciones contractuales. Esto pueden ser, por ejemplo, el pago de los precios fijados para el servicio, así como los plazos de entrega establecidos.
2. Real Decreto 1211/1990, de 28 septiembre
Este Decreto es el encargado de regular los derechos y obligaciones de los agentes de seguros, vinculados o no vinculados a una entidad aseguradora. Establece los requisitos mínimos de personalidad jurídica, formación, habilitación y las condiciones de actuación de los agentes. Asimismo, determina las relaciones entre los agentes y las entidades aseguradoras, así como los procedimientos para la resolución de conflictos.
¿Cuáles son las funciones de este organismo?
Este cuerpo dispone de muchas funciones diferentes. Una muy importante es la de determinar los términos de los contratos de transporte. Esto significa que los miembros de la junta deben revisar los documentos y discutir las condiciones con los contratantes para determinar los términos del acuerdo.
Esta función ayuda a asegurar que ambas partes entiendan bien el proceso y cumplan con él. Otra función importante es la de resolver disputas relacionadas con contratos de transporte. Esto significa que si hay una disputa entre un transportista y un cliente, la junta arbitral puede ayudar a llegar a un acuerdo para resolver la disputa sin necesidad de llevar el caso a los tribunales.
Esta, también puede emitir órdenes para resolver la disputa, tales como ordenar a un transportista que cumpla con los términos del contrato, o imponer sanciones por incumplimiento.
La Junta también proporciona ayuda al sector de los transportes
Ayudar a los participantes en el mercado de transporte, es otra de sus funciones, con esta, pretenden mejorar sus contratos. Esto significa que las juntas arbitrales ayudan a los contratantes a identificar formas en las que pueden mejorar sus contratos para evitar conflictos futuros. También ayuda a asegurar que los contratos sean justos y equitativos para ambas partes.
Proporcionan consejos sobre la legislación relacionada con el transporte. Esto significa que las juntas arbitrales pueden proporcionar información sobre las leyes relacionadas con el transporte, así como consejos sobre cómo cumplir con ellas. Esto ayuda a asegurar que se cumplan las leyes relacionadas con el transporte y se protejan los intereses de los participantes en el mercado.