Gonzalo Bernardos siempre se muestra muy claro con sus previsiones económicas. Los últimos datos conocidos no invitan precisamente al optimismo. De hecho el conocido economista augura un "invierno duro".
Estas apreciaciones llegan después de conocerse las estadísticas del paro de septiembre, con las listas aumentando en 19.768 nuevos desempleados. En el programa de La SextaMás vale tarde se encargó de ofrecer su valoración. Mostró su preocupación por todo lo que está por llegar.
El incremento del número de parados entraba en sus planes. Era algo esperado después de que finalizara el periodo estival, que es una época muy propicia para el empleo debido al turismo y la restauración. Considera que no estamos ante "una situación inédita ni bastante peor de lo habitual".
De hecho cree que estos números "están bien". En cualquier caso, con vistas a los próximos meses augura un periodo un tanto complicado para nuestra economía. Sostiene que "el problema no son las cifras de ahora, sino las que pueden ser en noviembre, diciembre, enero y febrero".
Desde hace un tiempo se viene apreciando una cierta recesión en ciertos sectores. "Llevamos seis meses con las ventas en las empresas bajando", apunta Gonzalo Bernardos. A ello se le suma también la pérdida de poder por parte de la industria que "está empezando a afectar a las compañías de servicios".
El profesor de Economía también se detuvo en el capítulo de las ayudas. Los fondos europeos "no están llegando como desearíamos". Con todo esto se dan las condiciones necesarias para que el invierno sea especialmente duro.
Incluso se atreve a vaticinar que "va a llegar antes". Posiblemente a partir de noviembre ya se empiecen a apreciar las consecuencias.
Empeoramiento de los datos en el último trimestre del año
Gonzalo Bernardos explica que "empezamos creciendo el 0,6%". Pero existe la posibilidad de que "en el último trimestre del año sea del 0,1%". Por lo tanto, en el tramo final de 2023 se producirá un empeoramiento que puede alargarse más de lo pensado inicialmente.
El experto asegura que "no veo nada absolutamente grave" en todos los datos que se han dado. Pero detecta la presencia de un factor que le puede pasar mucha factura a las familias. Y es "la subida de los tipos de interés".
De esta manera las hipotecas seguirán subiendo y los hogares se verán muy perjudicados Principalmente porque no dispondrán de tantos recursos para gastar. Cuando sucede una situación de estas características también hay una tendencia a ahorrar más para evitar posibles imprevistos en el futuro.
Las empresas también tendrán que sortear este contratiempo. Presentan "más dificultades para invertir y para crear ocupación". La coyuntura económica se vería muy afectada y se pasaría de "un crecimiento robusto a prácticamente el estancamiento".
Incluso no se descarta que unos cuantos países de la zona euro "tengan una bajada del PIB". Lo que daría como resultado una "recesión", indica el economista.
Una situación que durará poco tiempo
Nos enfrentamos a un escenario un tanto complejo, pero tampoco es cuestión de alarmarse. Gonzalo Bernardos estima que este periodo "va a durar poco", y la economía volverá a reactivarse una vez que regrese la primavera.
Pero la gran duda que tiene el profesor de Economía es cómo resistirán a esto los puestos de trabajo. En su opinión, entre finales de 2023 y principios de 2024, "se van a perder bastantes de los empleos creados". Esto provocará que la búsqueda de trabajo se complique mucho más.
No solo las familias, como advertíamos con anterioridad se verán perjudicadas. También lo notarán las empresas que se encuentren en números rojos y sus empleados. Otro asunto que influye sobre la economía es el periodo de incertidumbre política. Todavía no se sabe si habrá repetición de elecciones.