El Ministerio de Hacienda ha anunciado este martes una rebaja fiscal del 25% en impuestos para agricultores y ganaderos. El Gobierno ha acordado esta medida para paliar la crisis del sector debida, entre otros factores, a la sequía. Se trata de un importante alivio fiscal para 800.000 productores.
La sequía se ha convertido ya en una de las principales amenazas para la economía y la producción en España. La falta de lluvia y las altas temperaturas han secado el campo y ponen en jaque la producción de los próximos meses. Esto agrava la subida de los costes del último año.
Hay que recordar que el sector se ve afectado por el encarecimiento de los costes desde el estallido de la guerra de Ucrania. El impacto de la sequía en las explotaciones complica aún más la situación. Esta rebaja se une a la reforma fiscal de 2023, que contempla importantes bajadas impositivas.
Rebaja fiscal: cuánto y a quién beneficiará
El Ministerio de Hacienda ha publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE) esta rebaja fiscal. Se trata de una reducción del 25% en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para 800.000 agricultores y ganaderos. La rebaja es para los que tributan por el sistema de módulos.
Surge a petición del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para rebajar impuestos en el campo. El motivo, el impacto de la sequía que, junto a otros factores, perjudican el rendimiento de las explotaciones agrícolas y ganaderas. El sector arrastra esta crisis desde hace ya más de un año.
El principal hándicap del sector es el aumento de los costes que amenaza la rentabilidad de las explotaciones. La bajada de impuestos pretende aliviar su situación permitiendo un margen más amplio de beneficios. Además de la rebaja general, habrá reducciones especiales para los más vulnerables.
Más reducciones de impuestos
La medida anunciada hoy contempla una reducción del 50% para el sector del olivar, el almendro y la apicultura. La rebaja alcanzará el 30% en el caso de los cereales, oleaginosas y leguminosas, castaño, melocotón, nectarina, albaricoque y demás sectores ganaderos. Estos son los más amenazados.
El Gobierno calcula que será una rebaja de los impuestos valorada en 1.807 millones de euros en total. Se trata de la mayor rebaja fiscal del sector en la última década, motivada por una coyuntura excepcional. Además, la orden contempla otras formas de rebajar impuestos para los productores.
En concreto, permite aminorar el rendimiento neto previo un 35% por adquisición de gasóleo agrícola, y un 15% por compra de fertilizantes. Se mantienen los índices correctores del año pasado por piensos adquiridos a terceros. Y también por cultivos de regadío que utilicen energía eléctrica.
2.130 millones de euros contra la sequía
La rebaja se suma a las reducciones fiscales aplicadas en las comunidades autónomas y los ayuntamientos. Entre ellas, destaca la bajada aplicada al sector de los frutales no cítricos en las principales áreas de producción. A todo ello se suma la importante inversión del Gobierno para paliar la sequía.
La semana pasada el ministerio presentó un informe con actuaciones por valor de 2.130 millones de euros para luchar contra la sequía. El ministro del ramo, Luis Planas, ha destacado esta inversión “necesaria”. Según ha dicho, favorecerá “una mejor utilización del agua y una rebaja de la factura energética”.
El sector ha recibido la medida con satisfacción, aunque advierten que será insuficiente debido a la gravedad de la sequía. Los agricultores y ganaderos pidieron inyectar liquidez de forma rápida a los profesionales del campo. Aun así, creen que las pérdidas superarán con creces la rebaja fiscal.