Aunque los frutos secos y las semillas no tienen una estación clara, forman parte de una dieta versátil y de gran calidad. Algunas personas pueden evitarlos debido a las calorías que contienen. A pesar de su energía, se ha demostrado científicamente que los frutos secos, las semillas, las almendras y los cacahuetes promueven la salud.
De ellos obtenemos grasas, proteínas, fibras, minerales, vitamina E y fitoquímicos saludables de alta calidad, es decir, diversos compuestos fenólicos. Según las investigaciones, todos los frutos secos y semillas son buenos alimentos y se deben comer de diversas formas. Entre ellos, se diferencian principalmente en cuanto a la cantidad de grasa y composición de ácidos grasos, proteína y fibra.
¿Qué fruto seco está repleto de grasas saludables y no solemos consumir mucho?
Los frutos secos y las semillas se han considerado alimentos que engordaban porque contienen mucha grasa y energía. Sin embargo, su uso moderado no parece aumentar el peso. En un estudio, se agregaron nueces o dulces a la dieta para obtener la misma cantidad de energía. Los dulces condujeron al aumento de peso, mientras que las nueces no.
En este sentido, existe una variedad de nuez que proporcionaría excelentes cantidades de grasas saludables. Y, aunque podemos encontrarla en el supermercado, no se caracteriza —precisamente— por ser una de las variedades más consumidas. Se trata de la nuez de macadamia.
La nuez de macadamia o nuez australiana es originaria de la costa este de Australia. En los últimos años, ha sido catalogada con frecuencia como la nuez más valiosa del mundo, debido a que su cultivo y procesamiento es laborioso y complicado.
Crece exactamente tal y como quiere, por lo que, en realidad, se trata de una de las nueces más complicadas y difíciles de cultivar. No solo eso, su cuidado requiere de unas condiciones ciertamente óptimas.
Y solo produce nueces a la edad de siete años. Por todo ello, la nuez es más rara en comparación con muchas otras nueces y, por lo tanto, la macadamia a menudo se considera una nuez de lujo.
Repleta de grasas buenas, las propiedades de la nuez de macadamia
El sabor de la macadamia es suave y mantecoso, lo que se explica por el alto contenido de grasa de la nuez. Del mismo modo, esta variedad de nuez tiene menos carbohidratos que otras nueces.
El contenido de grasa de una nuez de macadamia puede ser de hasta el 75% del peso de la nuez entera. Mejor aún, se estima que cerca del 80% de la grasa presente en estas nueces es grasa monoinsaturada, la cual proporciona muchos beneficios a la salud.
La macadamia también contiene ácidos grasos omega-7. No en vano, es considerada como una de las pocas fuentes que existen de ácido palmitoleico. Además de antioxidantes, vitaminas del grupo B y E.
Asimismo, su consumo nos puede aportar fósforo, potasio, tiamina, hierro y magnesio. Por tanto, si deseas consumir frutos secos verdaderamente nutritivos y saludables, no te puedes perder las deliciosas y delicadas nueces de macadamia.
Ayudan a reducir el riesgo de muchas enfermedades
Las nueces y las semillas se han relacionado con varios efectos positivos para la salud en los estudios. Al parecer, su consumo estaría ligado a una presión arterial más baja y a un menor riesgo de padecer la enfermedad de las arterias coronarias.
Además, se ha encontrado que las personas que consumen nueces y semillas regularmente tienen niveles más bajos de azúcar en la sangre. Así como una menor cantidad de grasa intraabdominal, es decir, visceral, que las personas cuya dieta no incluye nueces y semillas.
También tienen un menor riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Especialmente las avellanas, los cacahuetes, las nueces de macadamia, las almendras y las pecanas contienen una gran cantidad de ácidos grasos monoinsaturados y antioxidantes.
En lo que a las semillas se refiere, se encuentran especialmente en semillas de calabaza y semillas de sésamo. Pueden reducir la mortalidad por enfermedades cardiovasculares y reducir el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.