Con la llegada del verano, son muchas las personas que desean ir a tomar el sol para coger un tono de piel más bronceado. Aunque dichos rayos solares pueden ser beneficiosos para nuestra salud (ya que nos aportan vitamina D), un exceso de ellos también podría acarrear graves consecuencias. En este sentido, la crema solar nos es de gran ayuda, pero los expertos avisan de que cometemos hasta 2 errores muy graves con ella....
El cáncer de piel, ¿se puede prevenir?
Cuando estamos sometidos a un exceso de solación, las consecuencias pueden ser nefastas. El servicio de dermatología del Hospital Clínico Virgen de la Victoria establece que 9 de cada 10 melanomas se deben a los rayos solares. Mientras tanto, solo 1 de ellos es el que está vinculado a factores genéticos.
Los melanomas un tipo de cáncer de piel. Esto se origina cuando los melanocitos (las células que se encargan de dar color bronceado a la piel) comienzan a crecer de forma descontrolada. Los rayos ultravioleta son sin duda la causa principal, ya que ocasionan daños en el ADN de las células de la piel.
Enrique Herrera Acosta, jefe de servicio de dermatología del Hospital Clínico, señala en Diario Sur que: "El cáncer de piel es una enfermedad maligna producida por la división y crecimiento descontrolado de las células que la forman. Este tiene la "capacidad para invadir los tejidos y estructuras sanas de alrededor, y en algunos casos, llegar a otros órganos a distancia".
Existen diferentes tipos de cáncer de piel. Lo que todos tienen en común es el factor de riesgo que está implicado, y son las radiaciones solares. Los especialistas y dermatólogos siguen abogando por la prevención, ya que es un pilar fundamental para evitar sufrir este tipo de tumores.
Por otra parte, existe un dato que preocupa bastante a los médicos, y es la incidencia que va sumando cada año este tipo de cáncer. Para que nos hagamos una idea, se ha llegado a multiplicar por quince en los últimos cincuenta años.
En España, sin ir más lejos, cada año se diagnostican 78.000 nuevos tumores de piel, de los cuales 75.000 no son melanoma. El servicio de dermatología del Hospital Clínico también apunta a que se realizan una media de 2.000 operaciones anuales.
¿Qué 2 errores cometemos casi siempre en la playa?
Es muy habitual que las ansias de ir a la playa o a la piscina nos haga olvidar algunos hábitos rutinarios (aunque también necesarios). Muchas personas todavía pecan a día de hoy al no protegerse como es debido del sol. El principal motivo es la poca concienciación sobre el peligro real al que nos enfrentamos.
En este sentido, la crema solar es un producto fundamental, que debemos llevar siempre con nosotros, incluso en invierno. Pero a pesar de que su uso está bastante extendido, se hace francamente mal, y lo peor de todo es que está en juego la salud.
El primero es su aplicación. El protector solar debe aplicarse siempre 30 minutos antes de la exposición al sol y renovarlo cada dos horas. Esto último es importante, sobre todo si sudamos mucho o nos hemos bañado.
El segundo es el tiempo de exposición: en este caso, no es recomendable tomar sol entre las 12:00 y las 16:00 horas puesto que son las más peligrosas. Ni siquiera aplicando el protector solar de más duración estaremos protegidos al 100%, y menos en esas horas.
La crema solar, siempre que salimos de casa
También deberíamos ponernos protección si salimos a hacer ejercicio o a realizar cualquier actividad al aire libre. Si tenemos niños es fundamental que controlemos su limitación a la exposición solar, así como añadirles cremas con alta protección. Esto sería muy necesario debido a que presentan una piel más delicada.
También cabe resaltar la importancia del diagnóstico precoz. Para ello, es necesario realizarse evaluaciones periódicas ante la presencia de cualquier alteración cutánea. De esta forma, cualquier lunar, llaga, protuberancia que cambiasen de forma inusual debería ponernos en alerta.