Ducharse por la mañana o por la noche es un hábito que polariza a la gente. Por un lado encontramos a quienes no conciben el inicio del día sin una ducha energizante, mientras que otras personas no son capaces de conciliar el sueño sin una ducha por la noche que les libere de las tensiones vividas a lo largo del día.
Lo cierto es que, según un estudio publicado recientemente, los dermatólogos tienen opiniones dispares al respecto. En el siguiente artículo vamos a repasar los pros y los contras de ducharse por la mañana o por la noche, y cuál es la mejor de las dos opciones.
La importancia de una buena higiene personal
Muchos de los procesos básicos e imprescindibles para el correcto funcionamiento de nuestro organismo tienen como consecuencia la liberación de toxinas y sustancias residuales que el cuerpo expulsa de diversas maneras.
El sudor y la orina son algunos de los residuos que nuestro organismo genera a nivel interno y expulsa hacia el exterior. Como consecuencia de esto, nuestra piel queda cubierta por estas sustancias y eliminarlas es imprescindible para evitar la proliferación de bacterias o microorganismos que pueden afectar a la salud.
Ducharse una vez al día evita infecciones de la piel
Por este motivo es importante mantener una correcta higiene personal y ducharse aproximadamente una vez al día, tal y como los dermatólogos recomiendan. Es aconsejable ducharse por la mañana o por la noche de forma breve, sin pasar más de 10 minutos bajo la ducha y con el agua templada, con el objetivo de evitar la irritación de la piel.
Además, el uso de geles o jabones químicos con un pH muy diferente al de la piel (pH neutro) son los causantes de muchas de las patologías infecciosas, descompensaciones bacterianas, deshidratación y sequedad de la piel.
Por ello se recomienda enjabonar sólo las partes que han estado más expuestas al sudor como las axilas, las zonas íntimas o los pies, siempre y cuando se opte por tomar una ducha al día. Cuando se decida ducharse un día sí y otro no, enjabonarse la totalidad del cuerpo es lo ideal.
¿Es mejor ducharse por la mañana o por la noche? Pros y contras
Ahora bien, ¿cuál es el peso que juega la hora a la que decidimos ducharnos? Lo cierto es que ducharse por la mañana o por la noche tiene sus inconvenientes y sus beneficios, según el tipo de persona y sus necesidades psicofisiológicas.
A continuación vamos a exponer algunos de los pros de ducharse por la mañana o por la noche y el tipo de persona a la que se recomienda tomar una ducha a primera hora de la mañana, o por el contrario, a última hora del día.
Ventajas de ducharse por la mañana
Para todas aquellas personas que llevan muy mal el hecho de madrugar y les cuesta mucho despertar, la mejor forma de hacerlo es con una ducha por la mañana. Así lo ha afirmado la psicóloga Janet Kennedy en un artículo publicado en The New York Times.
Kennedy explica que existen individuos más vespertinos que matutinos y que son a estos a los que los profesionales de la salud recomiendan ducharse por la mañana. Esto es así porque el agua de la ducha incrementa el nivel de alerta de la persona, ayuda a regular la temperatura corporal y a romper con el ciclo del sueño en el que nos sumergimos al dormir.
Además, como hemos comentado anteriormente, durante la noche el organismo realiza múltiples procesos de regeneración celular que crean deshechos orgánicos expulsados a través del sudor. Estas sustancias se van acumulando a lo largo de las horas de sueño y es necesario retirarlas de la piel.
Pros de ducharse por la noche
En el bando opuesto se encuentran las personas con problemas para conciliar el sueño. Para estos individuos, una buena ducha templada 1 hora antes de ir a dormir reducirá el insomnio de conciliación y les ayudará descansar de una manera adecuada.
Esto es debido a que una ducha por la noche con agua tibia ayuda a aumentar la temperatura corporal que, en múltiples ocasiones y debido a los procesos asociados al ritmo circadiano, baja demasiado. Esto deja al organismo con menos temperatura de la necesaria para un buen descanso y lo hace trabajar más para conseguir aumentar unos pocos grados.
Las tensiones y el estrés acumulados a lo largo del día también son factores que hacen que las personas no puedan dormir bien. Una ducha por la noche puede tener efecto calmante y relajante, ya que permite a las personas desconectar de la rutina y terminar el día de forma placentera.
¿Cuál es la recomendación de los dermatólogos?
Lo cierto es que los profesionales de la salud tienen opiniones bastante divergentes. Mientras unos focalizan su atención en fomentar el buen descanso de la persona, otros lo hacen en impedir las lesiones y la irritación de la piel.
Cabe destacar un inconveniente importante de no ducharse por la mañana: las sábanas quedan impregnadas del sudor y las partículas muertas que vamos desprendiendo a lo largo de la noche. Debido a que la ropa de cama suele cambiarse una vez a la semana, dormir en ese tejido hace necesaria una ducha rápida por la mañana para retirar esos residuos de la piel.
No obstante, existe la opción de ducharse por la noche y por la mañana siempre y cuando estas duchas sean cortas, con agua templada y con el uso de jabones con pH neutro. A pesar de esto, muchos dermatólogos recomiendan hacerlo solo una vez al día.