Ahora que nos encontramos en pleno invierno, no hay duda que los resfriados, catarros y gripes son tremendamente comunes. Y el dolor de garganta muy habitual. Por suerte, existe una infusión que puede ser de mucha ayuda.
En invierno es muy común el dolor de garganta
El dolor de garganta generalmente se refiere al dolor en la faringe y el área del cuello. Dado que hay muchos tipos de tejidos en el área y la faringe está involucrada tanto en la respiración como en la deglución, las causas del dolor también son múltiples.
Las causas más comunes son las infecciones de garganta y la sequedad de garganta provocada por la congestión nasal. La inflamación de la faringe o las amígdalas puede ser causada por un virus o una bacteria. Más comúnmente, es una infección viral, que, especialmente en las primeras etapas, a menudo se siente como un dolor en la garganta.
Eso sí, es cierto que la mayoría de la afección de la laringe o las amígdalas suelen ser leves, las cuales se tienden a curar a los pocos días por sí solas, sin tratamiento. En relación con un resfriado común causado por un virus u otros resfriados, la nariz se obstruye, por lo que respirar por la boca seca la garganta y causa dolor en la faringe y la garganta.
No en vano, los resfriados suelen ser una de las causas más habituales de dolor de garganta. Al igual que este puede ser originado por cualquier factor que cause irritación de las membranas mucosas (como el tabaco, polvo o productos químicos).
¿En qué consiste la infusión útil contra el dolor de garganta?
A menudo, el dolor de garganta tiende a acompañarse de otros síntomas típicos, como tos y sequedad (aunque es cierto que todo dependerá de la causa). Por ejemplo, cuando se trata de un dolor de garganta causado por un resfriado, la inflamación origina un molesto dolor. Mientras que si se trata de una laringitis, es la sequedad la que origina las molestias.
Por suerte, existe una infusión, muy fácil de preparar en casa, que puede acabar convirtiéndose en nuestro aliado para esos momentos en los que nos molesta la garganta (o nos duele).
Y posiblemente te sorprenda, ya que se trata de una infusión de pimienta negra. ¿Sorprendente, verdad? Todo se debe, como veremos, a que la pimienta negra proporciona cualidades antiinflamatorias y antibacterianas.
¿Cómo hacer la infusión de pimienta negra?
Es en realidad muy sencillo. Tan solo tienes que llevar a ebullición 25 centilitros de agua. Una vez entre en ebullición, apaga el fuego y añade 20 granos de pimienta negra. Deja en infusión y, pasado el tiempo, cuela. Si lo deseas, puedes endulzar al gusto, aunque lo preferible para disfrutar de todos sus beneficios sin añadir calorías es no hacerlo.
¿Cuáles son los beneficios de la infusión de pimienta negra?
En realidad es la piperina, el alcaloide del que proviene el picante de la pimienta, la que le otorga sus propiedades medicinales. En este sentido, numerosos estudios han demostrado que esta sustancia tiene propiedades tanto antiinflamatorias como antibacterianas.
La pimienta aumenta la producción de saliva, las secreciones gástricas y la actividad de las enzimas pancreáticas. También facilita la digestión, limitando la hinchazón, combatiendo las náuseas y el estreñimiento ocasional.
También, se sabe que actúa contra las grasas, puesto que ralentizan la digestión. Eso sí, hay que tener especial cuidado, especialmente si somos propensos a las hemorroides o la acidez estomacal.
Por otro lado, ¿sabías que la pimienta negra con la cúrcuma tiende a convertirse en la mejor combinación? Esto se debe a que favorece la asimilación de la curcumina, un potente antioxidante que previene el envejecimiento celular y estimula el sistema inmunitario.