En plena temporada de vacaciones de verano, es necesario extremar las precauciones en la carretera. Siguen siendo muchas las personas que eligen el coche como su medio de transporte para desplazarse, algo que hace saltar las alarmas en la DGT.
Las multas de la Dirección General de Tráfico se multiplican durante esta época del año debido al aumento de los desplazamientos. En los mismos, los conductores suelen saltarse los límites de velocidad, algo que termina en sanción.
A todo ello, además, hay que sumarle la nueva decisión de la DGT de colocar radares en nuevos puntos con el objetivo de controlar al máximo posible este tipo de situaciones.
Las estrategias de la DGT para controlar las infracciones son variadas
La Dirección General de Tráfico siempre está en constante búsqueda de infractores. Aquellos conductores que no respetan la norma se encuentran en su punto de mira y esto hace que el organismo refuerce sus medidas.
Para hacerlo, lanza cada vez más estrategias para poder pillar a los infractores al momento y poder emitir la sanción correspondiente. En esta ocasión, la innovación ha llegado con las nuevas ubicaciones de los radares de velocidad, grandes conocidos de los conductores.
El nuevo lugar donde la DGT colocará los radares de velocidad
Esta nueva zona es una que los conductores no suelen tomar demasiado en serio. Hablamos de los tramos de obras. En la mayoría de los casos, los usuarios de la vía suelen pasar a más velocidad de la permitida, lo que los pone en riesgo tanto a ellos como al resto.
En el caso de no cumplir la normativa en estas áreas el peligro se multiplica. Hay que tener en cuenta que, en estos casos, las circunstancias de la vía pueden cambiar, dificultando la conducción a través de obstáculos como carriles más estrechos, por ejemplo.
Las zonas de obra, en el punto de mira
Por todos estos motivos, desde la DGT han decidido cambiar su estrategia y centrar su atención en los tramos de obra. En estos puntos será donde se coloquen las cabinas de radar fijo o radares móviles para pillar in fraganti a los infractores.
Desde Tráfico avisarán al principio del tramo cuando existe un radar en el mismo. Para ello, utilizarán una señal amarilla en la que se indicará cuál será la velocidad máxima permitida hasta que se llegue a la zona del tramo sin obras.
El exceso de velocidad, un problema común
De acuerdo con los datos de la DGT, más de un millón de los usuarios son sancionados cada año debido al exceso de velocidad. Tan solo en 2020, los radares emitieron cerca de 2,5 millones de denuncias por este motivo.
Por otro lado, cabe recordar que las sanciones pueden venir en forma de multas económicas, así como de pérdida de puntos, dependiendo del exceso de velocidad del usuario particular.
Sanciones económicas y pérdida de puntos
Existen límites establecidos para valorar cómo de grave es la infracción. En los casos de turismos, los más comunes, exceder hasta en 30 km/h el límite cuando este sea de 120 km/h supone una sanción de 100 euros, sin pérdida de puntos.
Si se circula a más de 150 km/h, hasta un máximo de 170 km/h, conlleva una sanción de 300 euros y la pérdida de 2 puntos. Circular entre 171 y 180 km/h, conlleva una sanción de 400 euros y la pérdida de 4 puntos.
Si se hace entre 181 y 190 km/h, la multa es de 500 euros y la pérdida de puntos asciende a 6. A partir de 191 km/h, la infracción es muy grave y la multa es de 600 euros con pérdida de 6 puntos. A partir de 200 km/h, se considera delito y conlleva penas de prisión.