Es difícil no tener joyas en plata de ley como pendientes, pulseras, cadenas, anillos, etc. Su brillo, el precio y su versatilidad hacen de este material uno de los populares para la joyería. Sin embargo, cuando descuidamos estos artículos en nuestros joyeros, las hermosas piezas se oscurecen y pierden su brillo. Cuando el oxígeno o el azufre entran en contacto con la plata, se unen químicamente en su superficie y hacen que esta se vea sucia o descolorida.
Afortunadamente, cuidar la plata y reducir el oscurecimiento es muy sencillo y lo podemos hacer en casa. A continuación os contamos cómo limpiarla de forma casera para que tus joyas o artículos de plata vuelvan a brillar y recuperen su resplandor.
¿Qué tenemos que saber de la plata de ley?
Conocer un poco más la plata de ley nos ayudará a comprender los atributos físicos de nuestras joyas y cómo podemos cuidarlas. La pureza del metal, por ejemplo, determina qué tan maleable es y qué tan rápido se oscurece.
Por ejemplo, la plata de ley 950 se doblará más fácilmente y se oscurecerá más rápidamente que la plata de ley 925 debido a su mayor pureza, por lo que se debe tener especial cuidado con las joyas de plata de ley 950.
Hay que tener en cuenta que en determinados diseños, los orfebres permiten intencionalmente que partes de la pieza se oscurezcan y se oxiden, por lo general pequeños detalles, para resaltarlos más. Este detalle puede perderse, sin embargo, con una limpieza y pulido excesivos. Así que nos tenemos que asegurar de identificar cualquier brazalete, pendientes, anillos o collares de plata oxidados a propósito que tengamos y dejarlos a un lado para limpiarlos por separado.
Cómo limpiar la plata en casa
Para los casos en que un paño limpiador no es suficiente para eliminar el deslustre, podemos hacer nuestro propio limpiador de plata económico y ecológico utilizando ingredientes de nuestra cocina.
Cabe señalar, sin embargo, que los limpiadores de plata no son para todos los tipos de joyas. Por ejemplo, nunca debemos sumergir joyas adornadas con perlas o gemas opacas (por ejemplo, turquesa, ópalo, cornalina, onix), ya que esto podría dañar seriamente estas piedras más blandas. A estas piezas le daremos un enjuague muy breve si se ensucian demasiado.
Incluso para las joyas con piedras preciosas transparentes (por ejemplo, topacio azul, amatista, granate), tenemos que tener especial cuidado al usar un limpiador de plata: los productos químicos podrían situarse debajo de las piedras preciosas y desenganchar cualquier pegamento. Además, no podemos usar limpiadores en las joyas oxidadas; en lugar de eso, debemos utilizar una gamuza para limpiar la plata.
Después de usar cualquier limpiador, debemos asegurarnos de enjuagar bien la plata con agua corriente o con un paño limpio y húmedo. Esto es especialmente importante para piezas con detalles o grabados, ya que el producto puede pegarse en pequeñas grietas y endurecerse. Después, debemos secar las piezas con un paño de microfibra para evitar que se formen manchas de agua blanca.
A continuación os detallamos los diferentes métodos que existen para limpiar la plata en casa:
1. Agua y jabón
Si el paño de limpieza no quita el oscurecimiento, primero debemos probar con agua tibia y un jabón suave para lavar platos sin amoníaco ni fosfato. También debemos usar agua y jabón para limpiar las piezas antes de usar cualquiera de los métodos que te contamos a continuación.
2. Bicarbonato de sodio y agua
Es posible que hayamos oído que una pasta de dientes no blanqueadora que no sea gel puede ser un buen sustituto de los limpiadores de plata comerciales, pero hoy en día estas pastas dentales básicas son difíciles de encontrar o distinguir de las pastas dentales que decoloran la plata.
En su lugar, podemos hacer una pasta de bicarbonato de sodio y agua y usar un paño limpio para aplicar una pequeña cantidad a la joya y pulir. Para artículos grabados, estampados o con detalles, debemos diluir la pasta con más agua y usar un cepillo de dientes de cerdas suaves para limpiar los grabados. Después, enjuagamos la pieza con agua tibia y la secamos con un paño limpio.
3. Aceite de oliva y jugo de limón
Otro método para limpiar plata de forma casera es mezclando 1/2 taza de zumo de limón con 1 cucharadita de aceite de oliva en un recipiente lo suficientemente grande como para contener la solución de limpieza y un paño pequeño de microfibra. Debemos sumergir el paño en la solución y escurrirlo para que no gotee. Luego pulimos la plata, enjuagamos y secamos.
4. Vinagre blanco y bicarbonato de sodio
Podemos usar este limpiador suave para eliminar las manchas oscuras de la plata. Para ello remojamos la pieza deslustrada en una solución de 1/2 taza de vinagre blanco y 2 cucharadas de bicarbonato de sodio durante dos o tres horas. Después enjuagamos y secamos.
5. Bicarbonato de sodio, sal, papel de aluminio y agua hirviendo
Para usar este método necesitamos bicarbonato de sodio, sal y papel de aluminio. Tenemos que forrar con papel de aluminio una bandeja de horno o el fregadero de la cocina, con el lado opaco hacia abajo.
Colocamos las piezas de plata sobre el papel de aluminio. Luego vertimos agua hirviendo sobre las piezas hasta que estén cubiertas y agregamos 2 cucharadas de bicarbonato de sodio y sal.
Removemos para que el bicarbonato se disuelva. La reacción química hace que el oscurecimiento se transfiera al papel de aluminio y en unos 5-10 minutos veremos que el deslustre desaparece de la joya. Enjuagamos la pieza con agua y luego la secamos y la pulimos con un paño suave.
Cómo evitar que la plata se haga oscura
Existen una serie de cuidados preventivos para que nuestros artículos de plata no se oscurezcan y pierdan su brillo y no tengamos que limpiarlos. Con estas prácticas mantendremos siempre en buen estado nuestras piezas. A continuación os damos algunos consejos:
1. Desgaste
Podemos evitar el oscurecimiento si usamos nuestras joyas a menudo. Los aceites de nuestra piel ayudan a “limpiar” la plata y la mantendrán con un aspecto brillante constantemente.
2. Evitar la exposición
El contacto con productos químicos domésticos, transpiración, cloro o cualquier sustancia que contenga azufre, como por ejemplo mayonesa, huevos, mostaza, cebolla, látex o lana, causará corrosión y deslustre.
Por lo tanto, es una buena idea quitarse las joyas de plata cuando hagamos tareas del hogar. La luz solar directa también hace que pierda brillo, así que tenemos que evitar llevar artículos de este metal cuando vayamos a la playa o tomemos el sol.
Las lociones, los cosméticos, la laca, productos para el cabello y los perfumes también perjudican la plata y aceleran el oscurecimiento. Por esta razón, cuando nos vestimos nos ponemos las joyas cuando ya hemos terminado de arreglarnos.
3. Almacenamiento
Como la exposición al aire la oxida, el almacenamiento en bolsas de plástico herméticas es una gran medida preventiva. Solo tenemos que asegurarnos de no almacenar varias piezas de joyería en la misma bolsa: la plata es un metal blando, por lo que las piezas pueden rayarse entre sí. Las pulseras de eslabones o cadenas se deben mantener desenganchadas para evitar que se rayen.
Si no podemos usar bolsas de plástico, debemos intentar asegurar que el área de almacenamiento tenga poca humedad. También podemos colocar una tiza para minimizar la oxidación.
Referencias bibliográficas:
Bueno-Garesse, E. (2004). Aprendiendo química en casa. Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las Ciencias, 1(1).