En el mundo actual, donde los problemas de salud relacionados con la dieta son cada vez más comunes, Japón destaca como un país con una longevidad envidiable. Más allá de la reconocida dieta mediterránea, la alimentación de Japón ha demostrado ser un factor clave para mantener a raya enfermedades como el sobrepeso y la diabetes.
Existen algunas comidas en España, como la comida procesada y las grasas saturadas, que ellos evitan. Lo que ha contribuido a su salud y longevidad. De hecho, es conocido que los japoneses viven con mucha salud durante bastantes años.
Carne procesada: una opción a evitar
Uno de los principales enemigos de una vida larga y saludable, según la nutricionista Michiko Tomioka, son las carnes procesadas, tal y como ha revelado en Make It. En Occidente, estas carnes están presentes en platos como hamburguesas y perritos calientes, pero en Japón se evitan en la medida de lo posible.
Las carnes procesadas contienen altos niveles de sal y aditivos perjudiciales, y se ha relacionado su consumo con un mayor riesgo de cáncer de mama y colorrectal. Los japoneses optan por fuentes de proteínas más saludables, como el tofu, que es una fuente vegetal baja en sal y aditivos.
Bebidas y cereales azucarados: una trampa para evitar
El consumo excesivo de bebidas azucaradas ha sido relacionado con problemas de salud como el sobrepeso, la diabetes y el cáncer. En Japón, se evita tanto el consumo de bebidas azucaradas, como el abuso de las opciones “cero” o “sin calorías”.
Estos edulcorantes artificiales pueden tener efectos negativos en la salud intestinal a largo plazo. En su lugar, los japoneses optan por el té frío natural sin azúcar, siendo el té matcha una elección especialmente beneficiosa.
En cuanto a los cereales para el desayuno, se recomienda evitar aquellos que contienen azúcares refinados y optar por granos enteros. En Japón, el natto, un alimento a base de soja fermentada, es una opción nutritiva y poco conocida en Occidente.
Queso graso: una alternativa a considerar
Aunque existe cierta controversia, la nutricionista Tomioka sugiere evitar el consumo excesivo de queso graso en la alimentación. De hecho, considera que el equilibrio entre las proteínas que aporta y el colesterol que contiene no es óptimo.
En su lugar, los japoneses disfrutan del kinako, un producto elaborado con harina de soja y pasta de sésamo. Y es que proporciona una alternativa saludable y nutritiva al queso graso.
El secreto de la longevidad de los japoneses no solo se encuentra en su tradicional dieta rica en pescado y vegetales, sino también en evitar la alimentación perjudicial para la salud. La elección de proteínas saludables, la reducción del consumo de azúcares refinados y la moderación en el consumo de grasas saturadas son algunas de las claves.