Dar vueltas sobre ti mismo en la cama, contar ovejas, probar diferentes posturas, darle una oportunidad al sofá... seguramente estas acciones te resulten familiares. Esto se debe a que todos hemos o experimentaremos, en algún momento, dificultad para dormir.
Aunque existen diferentes causas, algo está claro: cada vez son más las personas que padecen este tipo de problema. Se calcula que, en España, aproximadamente 4 millones de habitantes sufren de insomnio crónico. Una cifra considerablemente alta teniendo en cuenta lo importante que es descansar debidamente.
¿Qué es y en qué consiste el insomnio?
Se entiende como insomnio la falta o mala calidad del sueño. Un hecho que afecta tanto a la vida social, como a las actividades físicas y mentales de quienes lo padecen. Pese a ello, no todo el mundo tiene que experimentarlo de la misma forma, pues pueden variar diferentes factores.
Los especialistas señalan que el insomnio puede ser puntual y ocasional como consecuencia de un acontecimiento perturbador (molestia, duelo, enfermedad física de corta duración, ambiente ruidoso, etc.).
Aunque en ocasiones, estos episodios pueden ser duraderos y se convierten en una afección crónica. Ocurre cuando los trastornos del sueño se presentan más de tres veces por semana, durante más de tres meses. Además, cabe destacar que es un problema que afecta tanto a adultos como a jóvenes.
¿Cuáles son las causas del insomnio y por qué dormimos mal?
Entre las causas más comunes encontramos el acostarse a horas distintas, dormir largas siestas o no contar con ambientes aptos para dormir (demasiada luz o ruido)... Por ello, en contadas ocasiones, la solución es posible cambiando nuestros malos hábitos de sueño por algunos más sanos.
A su vez, el no dormir correctamente puede estar relacionado con un alto consumo de estimulantes (como el té o las bebidas con cafeína) o un consumo abusivo de alimentos. Como precaución, los especialistas recomiendan que se preste especial atención a nuestra dieta, pues podría ser la culpable de nuestros problemas a la hora de ir a dormir.
¿Qué debe contener nuestra cena perfecta para dormir bien?
Curiosamente, existe un superalimento que puede ser muy beneficioso a la hora de ayudarnos a conciliar el sueño. ¿Sabes cuál es? Efectivamente, se trata de la avena. Por su riqueza en nutrientes (hierro, zinc, fósforo) y vitaminas.
Además, se convierte en un alimento energético y reconstituyente, siendo considerado como un alimento “saludable”, muy recomendado para niños y convalecientes.
Sin embargo, ¿sabías que también es muy beneficioso para ayudarnos a conciliar el sueño? Esto se debe a que es un tranquilizante y sedante natural, gracias a la presencia en su composición de avenina.
Este componente actúa contra el nerviosismo, de manera que es perfecta contra el estrés y el insomnio. Siguiendo en esta línea, un gran número de estudios demuestran que la avenina tiene efectos positivos sobre la ansiedad y el nerviosismo, por lo que no dudes en incorporarla en tu dieta.
Asimismo, gracias a su riqueza en vitaminas del complejo B, la avena ayuda a desarrollar, mantener y equilibrar el buen funcionamiento del sistema nervioso.
Pero su poder no se limita ahí. La avena ha sido considerada una fuente natural de melatonina, uno de los componentes con mayor importancia a la hora de equilibrar los ciclos de sueño. Su consumo facilita que nos sintamos más somnolientos y nos permite conciliar el sueño fácilmente.
¿Cómo comer avena para dormir bien?
Por suerte para ti, la avena es un alimento muy versátil que te permitirá ser original en la cocina. Puedes elaborar tortitas y combinarlas con los alimentos que más te gusten. Esta opción te permitirá combinarlas tanto con alimentos dulces como salados.
Además, también puedes aprender a preparar porridge de avena, una opción muy interesante tanto para el desayuno como para la cena. Eso sí, debes tener mucho cuidado: el exceso de avena puede originar flatulencias, por lo que, al final, no podremos disfrutar de sus beneficios si nos causa este inconveniente.